Las redes de información como Internet están transformando las condiciones sociales a escala global al cambiar parámetros como el tiempo, el espacio y la corporeidad. Estas redes adquieren usos alternos más allá de su función inicial y configuran nuevas formas de comunicación y organización social. Las tecnologías de la información no solo constituyen máquinas sino que también crean un nuevo humano y forma de interpretar la cultura.