Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria 2024 Ccesa007.pdf
Aprender con placer - el placer de aprender.pdf
1. Aprender con
placer - el placer
de aprender
Aprendizaje emocionante
Diana Lizbet Vaquero Negrete
2. Numerosos estudios muestran hasta qué punto es
importante dirigir el aprendizaje hacia el sentimiento de
competencias más que hacia la obtención de buenos
resultados, ya lo hemos dicho anteriormente. Y estos
estudios confirman que tal orientación tiene efectos
positivos sobre el aprendizaje en la formación escolar, en
la creatividad y en la perseverancia en los estudios.
La adquisición de conocimiento no siempre es sencillla. Sería
utópico creer y pretender que se pueda erradicar toda
forma de desagrado en el proceso de aprendizaje.
Se necesitan esfuerzos, superar etapas en ocasiones
arduas y recorrer una trayectoria sembrada de obstáculos.
Que el aprendizaje resulta a veces difícil es una realidad
bien conocida por todos los educadores y educandos.
3. Douglas y Mook explican que todo desequilibrio orgánico engendra un comportamiento
destinado a restablecer la armonía. Desde el momento en que una experiencia emocional intensa
viene a romper el equilibrio psicológico y fisiológico, una fuerza compensatoria (la emoción
antagónica) busca restituirla. Es esencialmente sobre ese proceso compensatorio sobre el que
se va a trabajar para contrarrestar las dificultades de aprendizaje.
Sin embargo, sería un error resignarse a
esta realidad sin intentar recibir provecho
de ella. Si el objetivo es aprender con
placer y estimular el placer de aprender,
se necesita primero y antes de nada,
transigir con el disgusto que se encuentra
a lo largo del recorrido del aprendizaje. No
obstante esa molestia puede transformarse
en placer si se sabe cómo sacar provecho
de la supercompetencia emocional que se
refiere a “utilizar las emociones y las
competencias emocionales de base”.
4. Todo proceso de aprendizaje pasa por fases agradables y
desagradables. Los períodos agradables son codiciados,
mientras los momentos desagradables, son temidos. Son estos
últimos precisamente los que conducen a toda clase de
comportamientos inadecuados tales como la falta de compromiso,
las conductas disruptivas, la inhibición y el abandono escolar.
Por eso, para avanzar en el proceso de aprendizaje se necesitan
por los menos dos cosas: primera, la voluntad de persistir con el
fin de superar los disgustos ocasionados por el esfuerzo de
aprender; segunda, el logro, esencial para contrarrestar las
preocupaciones ocasionadas por el esfuerzo de aprender.
Sin un mínimo de éxito, la voluntad termina por erosionarse y
desaparece. Ahora bien, sin voluntad y persistencia, solo queda
el abandono.
5. Por lo tanto, todo educador debe estimular en el aprendizaje dos aspectos:
1) Su voluntad al animarle a hacer frente a los disgustos resultantes en el
camino de aprendizaje.
2) Su sentido de competencia, al resaltar cada pequeño éxito susceptible
de conducirlo al resultado final.
Según un estudio del Instituto de Tecnología de Massachussetts en Cambridge
(Estados Unidos) publicado en la revista “Neurón” (2009), las células del
cerebro podrían aprender de la experiencia solo cuando hacen algo bien y
no cuando se falla. Los investigadores han conseguido captar el proceso de
aprendizaje que muestra cómo las células individuales cambian sus respuestas
en tiempo real como resultado de la información sobre cuál es la acción
correcta y cuál la equivocada.
6. El estudio aclara los mecanismos neurales que vinculan la información de
retroalimentación del entorno con la plasticidad neural, la habilidad del
cerebro para responder ante la experiencia. Este trabajo tiene implicaciones
muy interesantes para el conocimiento del proceso de aprendizaje y para la
comprensión y tratamiento de los trastornos en este proceso.
La corteza prefrontal organiza los pensamientos y las acciones en
correspondencia con los objetivos internos, mientras que el ganglio
basal está asociado con el control motor, la cognición y las emociones.
Este trabajo ha mostrado que estas dos áreas cerebrales, que se
sospechaba que jugaban papeles clave en el aprendizaje y la memoria,
tienen toda la información para realizar el procesamiento neural
necesario para el aprendizaje.
7. Earl K. Miller, coautor del estudio ha
demostrado que las células cerebrales
siguen diferentes reacciones si las
conductas recientes han tenido éxito o no.
De hecho, en sus experimentos con monos,
cuando una conducta tenía éxito, las
células se volvían más sintonizadas con lo
que el animal estaba aprendiendo.
8. Después de un fallo existían pocos o casi nulos cambios en el cerebro y
no se presentaban mejoras en la conducta.
Según se desprende es este estudio, es necesario proponer a los
aprendices metas que sean realistas y que, con algo de esfuerzo,
puedan conseguir. Porque si el aprendiz no alcanza ningún éxito o
si los que obtiene no se resaltan y no estimulan su sentimiento de
competencia, la ruta del aprendizaje corre el riesgo de ser
interrumpida en cualquier momento.
Para el profesor esto significa que es importante explotar cada
pequeño placer, cada pequeño avance y para eso debe conocer la
importancia de resaltar esas oportunidades cuando se presentan.
9. Para hacerlo debe estar atento a la trayectoria de sus aprendices, lo cual no
es fácil cuando se tienen muchos. En conclusión, los éxitos y los placeres
sentidos durante el aprendizaje son el antídoto contra el abandono
escolar. Pero también es importante la “personalización” del aprendizaje.
Como dice Ferrán Ruiz: “...la personalización del aprendizaje comporta aceptar y
asumir que cada aprendiz llega con una base de conocimientos y un conjunto de
destrezas diferente, y también con variadas aptitudes y aspiraciones. Para
personalizar el aprendizaje es necesario organizar la actividad de los centros, a
partir de la evaluación de las necesidades de cada aprendiz y de la
determinación de desarrollar su talento y su creatividad de la manera más
apropiada, mediante un amplio repertorio de estrategias educativas en las
cuales las TIC son fundamentales”.