Este documento presenta dos casos clínicos de pacientes que ingresaron al hospital con fracturas óseas. El primer caso es de un hombre de 60 años con fractura de meseta tibial que requiere reducción y fijación interna con placa. El segundo caso es de un hombre de 56 años con fractura subtrocanterica de fémur izquierdo que se trata con reducción y fijación interna con clavo gamma. Ambos pacientes son evaluados con exámenes de laboratorio y radiografías para establecer el diagnóstico y plan de tratamiento quirúrgico