El documento describe las diferentes etapas de una relación de pareja, desde el matrimonio hasta la muerte del cónyuge sobreviviente. Inicia con el desprendimiento del hogar paterno y el establecimiento de un nuevo hogar con la pareja. Luego, con cada hijo que llega se debe hacer espacio físico y emocional para cubrir sus necesidades. La etapa más difícil es la adolescencia de los hijos, donde los padres experimentan su propia adolescencia de nuevo y pueden sentir rivalidad o celos hacia los hijos. Una vez que los hijos
Esquema de Vacunas en enfermeria y tecnicas de vacunación
Desde el matrimonio hasta la vejez: Etapas de una pareja a lo largo de la vida
1.
2.
3.
4. Desde el matrimonio hasta el nacimiento del primer hijo.
Se da ese desprendimiento del hogar paterno, de la soltería y del estilo de vida que llevábamos hasta entonces. Es un
desprendimiento físico y emocional, pues dejamos el espacio físico que habitábamos en la casa de nuestros padres, así como
también el vínculo emocional y la relación con nuestros padres cambia, para dar lugar a nuestra pareja y esto no siempre es fácil,
ni rápido; podemos extrañar durante mucho tiempo, nuestra casa, recámara, comida de mamá, etc. Es por eso que quizá se quiera
estar de regreso cada en la que fue nuestra casa y comer la comida que prepara mamá.
La llegada de los hijos. Es el primer momento de crecimiento de la familia; con cada hijo que llega, hay que hacer el espacio físico
y emocional para cada uno de ellos. Hay que tener en cuenta que ese nuevo miembro de la familia demandará que se cubran
todas sus necesidades materiales, afectivas y sociales, entonces la pareja tiene que estar muy sólida en su vínculo para apoyarse
en la atención, educación y crianza de los hijos.
5. Desde el nacimiento del primer hijo hasta el nacimiento del ultimo hijo.
Comineza la etapa de la ninez y adolecencia de los hijos :
La adolescencia de los hijos: Ésta, quizá es de las más difíciles de atravesar pues se conjugan varias
circunstancias:
1) La pareja llega a la edad aproximada de los 40 años y la adolescencia de los hijos, les reactiva la propia
adolescencia con la diferencia de que además, se vive la crisis de “la mitad de la vida” que en algunos casos
resulta más intensa y conflictiva que la de los propios hijos adolescentes, pues no se acepta el estatus al que se
ha llegado en la vida para ese momento.
2) Se puede generar una rivalidad con los hijos del mismo sexo, porque ellos están en plena juventud, con toda la
vitalidad, atractivo e ilusiones que los padres ya no tienen. Por otro lado, se cela a los hijos del sexo contrario
porque ya empiezan a llamar la atención de otros jovencitos y entonces el amor de ellos ya no es para sus padres,
los cuales, son “destronados” y pasan a segundo plano.
3) La situación de los abuelos, puede estar teniendo dificultades de salud o económicas y hay que atenderlos,
apoyarlos o inclusive llevarlos a vivir a casa de la familia.
“
6. DESDE EL NACIMIENTO DEL ÚLTIMO HIJO HASTA QUE EL PRIMER HIJO ABANDONA EL HOGAR.
Etapa: Re-encuentro; los padres se quedan solos una vez que los hijos han tomado su camino y eso deja
libres a los padres para que se re-encuentren y vivan su relación de pareja como si fueran novios o recién
casados otra vez. En el mejor de los casos, es como la cereza del pastel, al ver a los hijos crecidos,
formados, hechos y derechos, sosteniéndose sobre sus propios pies, en el más amplio sentido de la
expresión e incluso iniciando ya el segundo momento de crecimiento de la familia al aumentar el número de
sus miembros con las parejas e hijos que los hijos va incorporando a la familia.
7. DESDE QUE EL PRIMER HIJO ABANDONA EL HOGAR HASTA
QUE EL ÚLTIMO HIJO ABANDONA EL HOGAR.
8. DESDE QUE EL ÚLTIMO HIJO ABANDONA EL HOGAR HASTA LA MUERTE DEL PRIMER CÓNYUGE .
La vejez llega y con ella ronda, la idea de la muerte, la separación y las subsecuentes pérdidas, tanto de
capacidades físicas e intelectuales, como de personas.
9. DESDE LA MUERTE DEL PRIMER CÓNYUGE HASTA LA MUERTE DEL CÓNYUGE
SOBREVIVIENTE.
Lo Más difícil aún si además, es sobrellevar alguna enfermedad crónica o degenerativa, o
se sufren carencias económicas, o se vive el abandono de los hijos. Entonces, hay que
adaptarse a las circunstancias, aceptando la dependencia hacia los hijos en un momento
dado pero sin que se pierda el respeto y trato digno de ellos hacia sus padres pues siguen
siendo familia a pesar de sus debilidades.