2. Los resultados de un polémico macroestudio en el
que ha intervenido un centenar de científicos de
instituciones de Europa, América, Oceanía y Asia,
contradicen la creencia ampliamente extendida de
que un consumo moderado de alcohol es más
beneficioso para la salud cardiaca que no tomar
nada de alcohol. Los nuevos resultados ponen en
entredicho las conclusiones de estudios anteriores
que sugerían que tomarse una copa al día promueve
la salud cardiovascular.
3. En realidad, a juzgar por los resultados del
macroestudio, presentados públicamente a través de
la revista académica británica BMJ (British Medical
Journal) (doi: org/10.1136/bmj.g4164.), editada por la
British Medical Association (Asociación Médica
Británica), reducir la cantidad de alcohol consumido,
incluso para quienes beben muy poco o de forma
moderada, puede mejorar la salud cardiovascular,
incluyendo un riesgo menor de enfermedad cardiaca
coronaria, un índice de masa corporal más bajo y una
presión sanguínea inferior.
El macroestudio se basa en una revisión de
evidencias aportadas por más de 50 estudios que
enlazaron los hábitos de bebida y la salud
cardiovascular para más de 260 000 personas.
4. El equipo del Dr. Michael Holmes, de la Escuela
Perelman de Medicina en la Universidad de
Pensilvania en Filadelfia, Estados Unidos, Juan Pablo
Casas, de la Facultad de Epidemiología y Salud
Pública en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical
de Londres, Reino Unido, y más de cien coautores,
han constatado que los individuos portadores de un
gen específico que normalmente lleva a un consumo
más bajo de alcohol a lo largo del tiempo, tienen, en
promedio, una mejor salud cardiovascular. En
concreto, los resultados muestran que las personas
que consumen un 17 % menos de alcohol por
semana tienen en promedio un riesgo de enfermedad
cardiaca coronaria un 10 % menor, una tensión
arterial más baja y un índice de masa corporal
también más bajo.
5. "Los nuevos resultados son muy importantes para
nuestra comprensión de cómo afecta el alcohol a las
enfermedades del corazón. Al contrario de lo que
informes previos afirmaban, parece ahora que
cualquier exposición al alcohol tiene un impacto
negativo sobre la salud cardiaca", argumenta el Dr.
Holmes. "Durante algún tiempo, estudios
observacionales han sugerido que sólo el beber
mucho era perjudicial para la salud cardiovascular, y
que el consumo bajo podía incluso ser beneficioso.
Esto ha llevado a algunas personas a beber
moderadamente basándose en la creencia de que
ello disminuiría su riesgo de enfermedad cardiaca.
Sin embargo, lo que estamos viendo con este nuevo
estudio es que un menor consumo de alcohol, incluso
para quienes lo beben en cantidades moderadas o
muy bajas, puede suponer una salud cardiovascular
mejor".
6. En el nuevo estudio, los investigadores examinaron la
salud cardiovascular de individuos que poseen una
variante genética del gen "alcohol deshidrogenasa
1B", que se sabe hace descomponerse al alcohol a
un ritmo más rápido. Esta rápida descomposición
causa síntomas molestos, incluyendo náuseas y
enrojecimiento facial, y ha propiciado menores
niveles de consumo de alcohol con el tiempo. Usando
este marcador genético como indicador
razonablemente fiable de un consumo más bajo de
alcohol, el equipo de investigación pudo identificar
las conexiones entre estas personas y una mejor
salud cardiovascular.
julio 14/ 2014 (NCYT)
Caroline E Dale, Luisa Zuccolo, Richard J Silverwood, Yiran Guo, Zheng Ye, David Prieto-
Merino.Association between alcohol and cardiovascular disease: Mendelian randomisation
analysis based on individual participant data. BMJ 2014; 349, 10 Jul 2014