La cultura Chancay se desarrolló en los valles de Chancay y Chillón en el Perú entre 900-1400 d.C. Produjeron cerámica de color negro sobre fondo blanco, incluyendo cántaros con rostros modelados y figurines. Practicaron entierros en tumbas rectangulares para la élite con ofrendas o más simples para el pueblo con "chinos" y "cuchimilcos". Colocaban al difunto flexionado con una máscara y "muñecas" mágico-religiosas.