Este documento discute cómo las actividades humanas están destruyendo el medio ambiente y causando desastres, y argumenta que debemos cambiar nuestro estilo de vida para revertir el daño. Señala que contamos con el conocimiento para resolver problemas ambientales y sociales, pero que necesitamos utilizar menos recursos, compartir más, y tomar decisiones basadas en el planeta en lugar de en intereses personales. Concluye que el daño ambiental aún es reversible si tomamos medidas políticas y sociales para lograr un mundo más sostenible.
2. Las tragedias que acaba de ocurrir en Chile, Haití puede
ser revertidas cuidando nuestro medio ambiente donde
habitamos; cada uno de nosotros somos los
responsables para que esta situación pueda cambiar y no
ocurra tanta desgracia. Las actividades humanas están
destruyendo el planeta, quizás echemos la culpa a las
grandes empresas industriales, pero no podemos estar
ajenos que los seres humanos, somos los únicos
responsables, de la contaminación de ríos, lagos y
océanos; la desaparición de bosques, la degradación del
suelo, la destrucción del ecosistemas; en fin, de la
degradación de la calidad del aire, la tierra y el agua.
3. ¿Por qué lo hemos hecho? Simplemente por haber buscado
mejorar nuestro nivel de vida, por darle más comodidades a
nuestra vida cotidiana, por estar a la moda, por tener lo
último en tecnología, por obtener más ganancias.
El mundo donde habitamos avanza por este camino que
venimos recorriendo como especie desde hace cientos de
años, ha sufrido rupturas increíbles por manos del hombre,
hemos destruido esa muralla del equilibrio natural del
ambiente global, con lamentables consecuencias que
nosotros mismos tenemos que soportar, o nuestros
herederos, sufrirán estas fatales tragedias como los ya
ocurridos a la fecha, terremotos, sismos, maremotos, etc. La
tierra se encuentra agrietada, destruida parcialmente, la
madre tierra llora.
4. Se nos plantea entonces una situación complicada. Debemos
abandonar el camino que nos enseñaron desde pequeños que era el
único, el mismo que transitaron nuestros padres, abuelos, bisabuelos y
mucho más allá. De un día para el otro, en términos históricos, nos
estamos viendo obligados, si queremos sobrevivir, a abandonar mucho
de lo conocido, muchos de nuestros hábitos, costumbres y gran parte
de nuestro modo de vida.
Contamos con todos los conocimientos científicos necesarios para
hacerlo. Podríamos empezar a resolver en cuestión de meses cada uno
de los problemas ambientales y sociales que hay en el mundo. En
pocos años podríamos lograr que haya más bosques de los que nadie
haya visto en las últimas generaciones. En menos tiempo aún,
podríamos limpiar casi todos los ríos del planeta hasta poder beber
agua de ellos. Terminar con el hambre y la sed, con cientos de
enfermedades. Restaurar la biodiversidad de enormes regiones y
reparar muchísimos de los daños ambientales que hemos cometido.
5. Pero para ello también deberíamos utilizar menos
energía, compartir el agua, no solo en lo referido
a la propiedad de la tierra, sino
fundamentalmente en cómo y para qué se la
utiliza. Tendría que dejar de haber personas
multimillonarias, empresas multimillonarias y
países multimillonarios. Tendríamos que dejar de
fabricar armas, reducir al mínimo los residuos y
reutilizar y reciclar la mayor parte de lo que
usamos. Dejar de producir artículos superfluos y
producir solo lo que sea realmente necesario.
El mundo tendría que dejar de “estar a la moda” y
de tener “lo último en tecnología”. Dedicar menos
horas a la televisión y más a tareas sociales y
ambientales como plantar árboles, educar y
educarnos y concientizar a las nuevas
generaciones. Tomar muchas decisiones en
función del planeta y no ya de nuestras
apetencias personales.
6. El desastre ambiental que
hemos causado aun es
reversible. Un mundo mejor
aun es posible y contamos
con las herramientas para
lograrlo, solo nos separa de
ello, la decisión política y
social de hacerlo.
Manteniendo las esperanzas y
trabajando mucho y muy duro
podremos lograrlo. El
Movimiento Peruanos Sin
Agua empieza con la firma del
pacto por el agua, que será el
próximo domingo adhiérete.