La Edad Media se desarrolló en Europa cristiana entre los siglos VI y XII, comenzando con la caída del Imperio Romano y terminando con el descubrimiento de América. En esta época, las actividades deportivas estaban mayormente reservadas para la nobleza y consistían principalmente en justas y torneos caballerescos, así como caza. Algunas actividades populares permitidas para el pueblo llano incluían lanzamientos de peso y de martillo, así como juegos con pelota.