La paradoja de Zenón plantea que un atleta nunca podrá llegar a su destino porque primero debe recorrer la mitad de la distancia, luego la mitad de la mitad, y así sucesivamente hasta el infinito. Sin embargo, al representar las distancias parciales como una serie infinita convergente, se demuestra que la suma es finita y el atleta sí puede completar el trayecto en un tiempo finito.