La educación depende del contexto social y la sociedad depende de la educación, por lo que existe una relación bidireccional. La educación actual enfrenta nuevos retos como la sociedad del conocimiento y las tecnologías, por lo que debe adaptarse continuamente a los cambios sociales. El modelo educativo debe elegirse en función del entorno social y cultural, y la escuela debe ser una institución abierta a las demandas sociales para formar estudiantes de manera holística e involucrarse con problemas económicos, familiares y sociales.