EL MUNDO QUE SURGIÓ DE LA MONTAÑA MÁS ELEVADA
Ilustraciones de Silvia Conzález
Texto de Miguel Ventayol.
(Para Ana y Enrique)
Cuento escrito por Miguel Ventayol, alias @entrevinazas con las ilustraciones de Silvia González.
Un cuento infantil surgido de una situación personal de Ana y Enrique, promovido por Ana L. que nos animó a Silvia y a Miguel a orientar nuestras ideas en un cuento impactante con un final cargado de esperanza.
#cuentos
#cuentosinfantiles
#Duelo
#Procesodeduelo
Alexandra, una chica de 21 años que llega a Sioux Falls junto a sus dos hermanos Adriana y Andres a estudiar en la universidad, le cambia la vida al conocer a los hermanos Vangarret y Simon Mazzocca. ¿Por qué? Ángeles, demonios, vampiros; tendrá que luchar contra la voluntad del infierno por proteger a alguien muy especial.
Alexandra, una chica de 21 años que llega a Sioux Falls junto a sus dos hermanos Adriana y Andres a estudiar en la universidad, le cambia la vida al conocer a los hermanos Vangarret y Simon Mazzocca. ¿Por qué? Ángeles, demonios, vampiros; tendrá que luchar contra la voluntad del infierno por proteger a alguien muy especial.
La canción del viejo borracho_Colección de poemasMiguel Ventayol
La canción del viejo borracho
Varios poemas de Miguel Ventayol
Breve colección de cancioncillas.
En estas poesías encontrarás cuadernos de viajes, miradas atrás, segundas oportunidades, añoranza con cierto pesimismo, amores frustrados, amistades crueles.
Todos quieren ser Brendan Fraser es un fanzine de homenaje al actor creado por Miguel G. Ventayol con motivo de la celebración del Reto Fanzine que se desarrolla en Albacete cada año. En esta ocasión fue en la cafetería Agua Viva la tarde del día 30 de noviembre.
EL FUNERAL MEJICANO DE DOUGLAS ADAMS_Fanzine 2021Miguel Ventayol
EL FUNERAL MEJICANO DE DOUGLAS ADAMS
Fanzine de Miguel Ventayol sobre la serie de Netflix, Dirk Gently: Agencia de Investigaciones Holísticas.
Editado y creado para la celebración del Reto Fanzine 2021 que se desarrolló
Colección de cuentos sobre asesinatos de Miguel G. Ventayol creados con motivo de la celebración del Reto #Fanzine 2021 que se celebró en la cafetería Agua Viva de Albacete, el día 30 de diciembre (al aire libre).
Cuentos cortos.
Narrativa
Fanzines
Colección de poemas y poesía de Miguel Ventayol.
#Poemas y #poesía dedicada a todas las personas que atraviesan o han atravesado un mal momento.
#enfermedadmental
#locura
#depresión
#ayuda
#apoyo
Ventayosvi resurrection_Fanzine de historias y cuentos brevesMiguel Ventayol
Ventayovski Resurrection es un fanzine creado por Miguel Ventayol con motivo de la celebración del Reto Fanzine 2020 que no se pudo celebrar de manera presencial con intercambio de fanzines, sino solo de manera online, compartidos a través de la red, como corresponde al siglo XXI.
El fanzine es de broma, de ironía, habla de Donald Trump, de Nacho Vidal y de risas. Si te lo tomas de otra manera es asunto tuyo.
#Fanzine
#RetoFanzine
#cuentos
#historias
Sandra Bullock es perfecta_Fanzine sobre cineMiguel Ventayol
Sandra Bullock es perfecta.
Fanzine confeccionado con la excusa de la celebración del Reto Fanzine 2020 que este año, por motivos obvios, del coronavirus, de la COVID19, no podremos celebrar como otros años, juntándonos a repartir fanzines impresos.
Este texto hace un repaso de la carrera de Sandra Bullock por algunas de sus películas. No pretende ser exhaustivo, solo entretenido.
Breve colección de poemas publicados en diversas redes sociales durante los años 2019 y 2020.
Para amantes de la poesía directa y certera, poesía clara y sencilla.
literatura
poesía
poemas
Colección de poemas de Miguel Ventayol denominada #Perimetral, una colección de poemas originales de corto alcance.
Poesía, literatura, canciones de consumo rápido para mentes inquieta y sin tiempo para pensar en los límites de la libertad, o los límites geográficos entre comunidades autónomas.
Un encuentro fortuito_Cuento de Miguel VentayolMiguel Ventayol
Cuento de Miguel Ventayol Sarrión con fecha de caducidad, inspirado en la cantidad de personas que están sacando lo mejor de sí mismos durante el periodo de cuarentena del Coronavirus.
Fanzine creado para el Reto Fanzine 2017 que se celebra cada año en la ciudad de Albacete.
Idea original de Miguel Ventayol, cuentos de Miguel Ventayol.
Cuentos, poesías, ideas originales.
Disparates..
La verdadera historia de Rachel Green_FanzineMiguel Ventayol
La Verdadera Historia de Rachel Green.
Fanzine del Reto Fancine 2013, que se celebra cada Navidad en la ciudad de Albacete.
Creado por Miguel Ventayol, basado en ideas originales del propio autor a raíz de las películas y vivencias de la famosa actriz Jennifer Anniston.
Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3.pdfsandradianelly
Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestr
ROMPECABEZAS DE ECUACIONES DE PRIMER GRADO OLIMPIADA DE PARÍS 2024. Por JAVIE...JAVIER SOLIS NOYOLA
El Mtro. JAVIER SOLIS NOYOLA crea y desarrolla el “ROMPECABEZAS DE ECUACIONES DE 1ER. GRADO OLIMPIADA DE PARÍS 2024”. Esta actividad de aprendizaje propone retos de cálculo algebraico mediante ecuaciones de 1er. grado, y viso-espacialidad, lo cual dará la oportunidad de formar un rompecabezas. La intención didáctica de esta actividad de aprendizaje es, promover los pensamientos lógicos (convergente) y creativo (divergente o lateral), mediante modelos mentales de: atención, memoria, imaginación, percepción (Geométrica y conceptual), perspicacia, inferencia, viso-espacialidad. Esta actividad de aprendizaje es de enfoques lúdico y transversal, ya que integra diversas áreas del conocimiento, entre ellas: matemático, artístico, lenguaje, historia, y las neurociencias.
3. EL MUNDO QUE SURGIÓ DE LA MONTAÑA MÁS ELEVADA
Cuento promovido por Ana Lucas.
Ilustraciones de Silvia Conzález
Texto de Miguel Ventayol
4. RASE UNA VEZ dos niños que subieron a lo alto de una
montaña y desde allí empezaron a mirar hacia el
horizonte y vieron….
-Espera, espera, espera, un momento –dijo el niño a la voz
desconocida que salía de algún lugar en su cabeza-, ¿la
montaña tiene nieve o no tiene nieve?
-Madre mía, siempre haces igual. No ha empezado el cuento y ya
quiere saber el final, ten un poco de paciencia, hija –dijo su
hermano que miraba al infinito concentrado, como si fuera a
suceder algo extraordinario.
-No sé lo que es la paciencia –dijo con inocencia. Era cierto,
hay muchas cosas que no tienen por qué saberse.
-Ah –contestó su hermano. Tampoco sabía lo que era la
paciencia pero lo había escuchado mientras nadaba y buceaba
en la tripa de su madre. Tantas veces lo había escuchado que lo
tenía grabado en la conciencia; al igual que otras muchas
palabras.
-¿Tú sabes lo que es la paciencia? –preguntó interesado. De
repente la montaña y la nieve habían quedado en segundo plano,
como por arte de infancia.
-Pues creo que sí, es como; es algo así como cuando –empezó a
decir al tiempo que pensaba-. A ver, espera que me aclare. Creo
que la paciencia es que quieres una cosa, mucho, mucho, mucho,
pero tienes que esperar un rato; a veces mucho, mucho, mucho.
Y ya. Lo que pasa es que, a veces, lo que quieres no llega.
-Entonces vaya rollo, ¿no?
-Pues sí, la verdad es que es un rollo porque, si quieres algo,
deberías tenerlo en el mismo momento en que lo pides.
-Por supuesto –dijo el pequeño con total normalidad.
La voz desde el infinito comenzó a sonar de nuevo, circular, los
arropaba; dulce como la hora de la siesta.
É
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6.
7. EN LA MONTAÑA vivían dos niños, uno era rubio, el otro moreno,
uno tenía los ojos verdes, el otro los tenía azules y eran
felices porque estaban juntos como si la vida alrededor…
-Yo no me entero, ¿eran dos niños, niños, o un niño y una niña?
–preguntó el primer niño, que parecía el más curioso de ambos.
-Pues es verdad. Porque no es lo mismo, aunque, por otro lado,
¿qué más da?
-No da lo mismo, una cosa es un niño y otra distinta una niña –
dijo el primero cargado de razón.
-¿Tú qué eres?
-Yo, yo, yo soy, ¡una niña! –dijo como si fuera la decisión más
importante del mundo.
-¡Entonces yo también soy una niña! –dijo él quien, como marca
la tradición, quería lo mismo que su hermano, digo, su hermana.
-¡No! No puede ser, uno tiene que ser un niño y el otro una niña
–dijo ella que, al parecer, era la más resuelta de ambos.
-Bueno, si tú lo dices, yo seré el niño. Pero yo quería ser una
niña como tú, así seríamos iguales.
-Pero es que, es que, yo creo que no somos iguales.
-¡Pues sí!
-¡Pues no!
-¡Pues vaya!
-Yo no hago las reglas –dijo ella un poco satisfecha de haber
convencido al otro niño, que la miraba receloso porque pensaba
lo contrario: ella se había inventado unas normas y él no fue
bastante espabilado para adelantarse.
8.
9. ÉRASE UNA VEZ DOS niños, un niño y una niña que pasaban el
rato en lo alto de una montaña que no tenía nieve, salvo en el
mes de enero y febrero, que eran los meses más fríos de aquella
zona tan alta del paraíso. La montaña era una montaña normal y
corriente, como las que salen en los Atlas del colegio de los
años 80. Allí dos niños dejaban que sus pies colgaran desde lo
más alto de un precipicio porque para ellos el miedo no era una
sensación que hubieran aprendido todavía, “el miedo se
aprende”, habían escuchado en la barriga de su madre un día,
“el miedo se aprende de los mayores. Por lo tanto no debemos
enseñarles a que tengan miedo”, era la voz de su padre, que
tenía un tono así como si leyera una revista o un libro. Se
notaba mucho porque hablaba distinto cuando leía o cantaba
que cuando solo le contaba cosas a su madre, por ejemplo sobre
lo que iban a comer o sobre lo cansado que estaba cuando
volvía a casa.
-Tú, ¿qué ves a lo lejos? –preguntó ella.
-Veo un montón de cosas pero, sobre todo, cielo.
-Ah –suspiró ella.
-A veces también veo pájaros, pero los veo como si estuvieran
allá a lo lejos, tan lejos que no puedo tocarlos con la mano.
Pero cada vez los veo más cerca, como si quisieran venir a
nuestro lado.
-Yo es que no veo mucho. Veo cielo, veo nubes, te veo a ti,
aunque esto no cuenta porque estás a mi lado. Veo animales
fantásticos; creo que veo muchas cosas pero no estoy seguro de
si las veo o me las estoy imaginando –dijo ella un poco triste.
Su hermano se dio cuenta de la tristeza de las palabras de su
hermana, quiso contar algo alegre para sacarle una sonrisa
pero solo se le ocurrió pasarle el brazo por los hombros. Ella
lo miró de reojo, miró hacia delante, volvió a mirar a su
hermano y empezó a reírse a carcajadas. Él empezó a reírse
también y pensó: “No he dicho nada y ha funcionado. ¡Qué buen
hermano soy!”
10.
11. BAJO LOS PIES de los dos niños empezó a crearse el mundo, un
mundo que ellos no conocían pero que, poco a poco, como por
arte de imaginación, surgió bajo sus piernas, que colgaban
felices y juguetonas.
-Me gustan los dedos de los pies.
-A mí también, recuerdo que en la tripa no paraba de
mirármelos.
-¿Tú también lo hacías? –preguntó la hermana.
-Sí, claro, no sé por qué. Pero son divertidos, ¡mira lo que sé
hacer con los dedos! –Y empezó a estirarlos, moverlos hacia
delante, hacia atrás, los estiraba de nuevo y a veces conseguía
que el pulgar del pie derecho se moviera solo.
Su hermana reía como si fuera la cosa más divertida que
hubiera visto en su vida mientras trataba, si mucho éxito, de
mover los dedos igual que su hermano. Pero solo podía
moverlos todos juntos, adelante y atrás, adelante y atrás.
-No te preocupes –dijo su hermano-, dentro de nada seguro que
te sale genial. Incluso mejor que a mí.
-¿Lo dices en serio? –preguntó ella suspicaz.
-Claro, no te voy a engañar con una cosa tan importante –
respondió él con absoluta inocencia. Y siguieron moviendo los
pies de adelante hacia atrás, como si fuera la cosa más
relevante del universo que estaba comenzando a crearse bajo
ellos.
Siguieron mirando cómo sus pies se movían y tomaron
conciencia de sus tobillos, blancos, casi pálidos por la falta de
sol, redondeados. Luego sus ojos se acercaron a sus rodillas
algo rechonchas pero divertidas y los muslos aplastados por el
peso de estar sentados en lo alto de la montaña.
-Las partes del cuerpo son divertidas –dijo ella.
-Eso pensaba yo.
12.
13. BAJO LOS PIES de los dos hermanos comenzó a crearse el mundo,
un mundo a su medida, de colores azules y rosas, a veces verdes
y anaranjados, amarillos pocas veces pero también. Blancos,
rojizos, de tonos pastel; un mundo entero bajo sus pies.
-Oye, ¿tú recuerdas las cosas que decían al otro lado, cuando
estábamos en la barriga? –preguntó la niña.
-Muchas cosas sí, otras son como palabras sueltas, como
párrafos de canciones que no tienen mucho sentido pero que,
así sin querer, aparecen y significan algo. Es un poco mágico,
no lo entiendo pero está ahí –dijo él.
-¿A qué te refieres?
-Pues verás, he oído muchas lágrimas pero algunas tristes y
otras de risa. Esas las sé diferenciar porque la barriga se
mueve de manera distinta. Pero recuerdo frases como que las
cosas siempre pueden ir peor y las cosas siempre pueden ir
mejor –dijo el niño de carrerilla, sin saber bien lo que decía.
-No te entiendo. Yo en la barriga oía canciones así como de
violines, de pianos y guitarras dulces. Escuchaba muchas
palabras cariñosas. Luego dejé de escuchar nada, así de repente
–dijo ella. Los dos se quedaron mirando a sus pies que bailaban
encima del mundo.
-Ah –contestó su hermano-, pues no sé qué significará esto, la
verdad. Pero solo sé que a mí me parece que las cosas siempre
pueden ir mejor. Al menos es, de las frases que escuchaba al
otro lado, la que más fuerza tomó, la que más resonaba. Como si
una fuera cediendo a la otra.
-¿Quieres decir que las cosas siempre pueden ir mejor ganó a
las cosas siempre pueden ir peor? –preguntó curiosa su
hermana.
-Supongo que sí. Pero tampoco estoy seguro. Fíjate, cuando
hemos empezado a hablar no había nieve en la montaña y ahora
hay medio mundo.
14. Los hermanos se quedaron un rato más contemplando todo lo
que se construía, como por arte de poesía, allá a lo lejos, pero
acercándose de manera veloz, continuada y silenciosa.
-Tienes razón…
ÉRASE UNA VEZ una niña que se llamaba Lúa y un niño que se
llamaba Leo, no me preguntéis por qué porque los nombres de
las personas son uno de los enigmas más complicados de
descifrar de la historia de la humanidad. ¿Por qué se llama una
persona Juan, porque su padre se llamaba Juan, porque así se
llamaba su abuelo o un pariente que vivió hace cien años?
-Pues a mí esos nombres me parecen bonitos –dijo ella.
-A mí también –respondió él, que no estaba muy seguro pero no
quería llevar la contraria a su hermana.
-A mí los nombres me parecen bonitos pero son importantes
también. Imagina que a la montaña la llamáramos cucaracha, a
los árboles martillos y a los pájaros…
-¡Tachuelas! –gritó Leo.
-¿Tachuelas? ¿Qué son tachuelas? –preguntó Lúa sonriente
conteniendo la risa.
-No lo sé, lo oí una vez y me parece un nombre divertido, los
pájaros podrían llamarse tachuelas…si te parece bien.
-Me parece genial.
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16. A SUS PIES los ríos comenzaron a llenarse de agua, las
corrientes alcanzaron velocidades acuáticas y algunos peces
fueron capaces de saltar de un lado a otro sin vergüenza y con
tanto descaro que algunos animales de la orilla trataron de
cazarlos a zarpazos. Los niños sonreían al ver cómo todo crecía
a su alrededor. Algo más lejos, una vez el río se iba calmando,
un pequeño lago con árboles alrededor y flores de distintos
colores formando algo que parecía una manta de colores desde
lo alto de la montaña.
-Es bonito todo ahí abajo, ¿verdad? –dijo ella.
-Sí, es muy chulo –respondió él que seguía concentrado en los
osos tratando de atrapar peces a manotazos.
El lago no era un lago demasiado grande, no habría cabido un
barco ballenero pero quizás sí una barquichuela para pescar
los fines de semana. Quizás una barquita de madera de esas que
utilizan los enamorados para perder el tiempo y contarse
secretos recitados con palabras susurradas y amables. En la
orilla, oculta tras unos arbolillos, apareció una casa de
paredes marrones y techo rojizo, varias ventanas le daban un
brillo extraño desde la distancia pero no dejaban ver nada en
el interior. Solo era una casa en la orilla del lago.
-¿Has notado eso? –dijo ella.
-¿Qué? No sé bien a qué te refieres –contestó Leo.
-La misma sensación que tuve cuando dejé de escuchar palabras
mientras nadaba en la tripa.
Leo se quedó callado un momento. Él notaba algo pero no sabía
apreciar bien qué era.
-Creo que te tienes que ir –dijo Lúa.
-¿No quieres que esté contigo? –dijo Leo apenado aunque sabía
que era el momento de dejar la montaña.
-No es eso –contestó Lúa.
-¿Entonces?
17. -Creo que tienes que irte, el mundo te está esperando ahí
abajo –dijo Lúa mientras miraba hacia abajo, hacia un cuadro
perfectamente dibujado, pleno de colores y detalles.
-Y tú, ¿no vienes? –preguntó Leo.
-No, yo me quedo aquí.
-Pues vaya rollo –protestó otra vez Leo.
-Un poco sí pero así son las cosas. –Ella se hizo la mayor
poniendo voz de adulto, aunque no le salía muy bien.
-Yo quería que vinieras.
-Sabes que siempre estaré contigo, ¿verdad? ¿A que sabes que
siempre estaré contigo?
18. ÉRASE UNA VEZ dos niños que estaban en lo alto de una montaña,
el niño se llamaba Leo y la niña se llamaba Lúa. Descansaban,
hablaban y miraban cómo el mundo iba creciendo a su
alrededor, perfecto como el cuadro de un salón muy elegante.
Los niños se habían quedado callados un instante mientras
seguían balanceando las piernas de delante hacia atrás y
vuelta, de atrás hacia delante. Se miraban las puntas de los
pies y luego comenzaban de nuevo. Con ese balanceo llenaban el
silencio.
Entonces, entonces, como por arte de sueños:
-¡Mira! ¡Mira! –gritó Lúa riendo-. Ha empezado a nevar.
Su hermano, que se había quedado un poco triste antes, de
repente comenzó a reír sin más.
-Ahora ya tenemos una montaña con nieve, ¡bien!
-Sí, parece que ya lo tenemos todo, ¿verdad que sí? –dijo Lúa,
miró a su hermano con dulzura, la cogió la mano y le dijo-. Es
el momento.
-Tú siempre serás la estrella cuando mire al firmamento –dijo
Leo.
-Y tú siempre serás el arco iris de ese mundo tan chulo que
está creciendo ahí abajo.
Porque estos dos hermanos sabían que el mundo, el que crece
bajo los pies como la hierba en mitad del campo, es un lugar
que surge en algún momento concreto, indefinido en el espacio,
de repente evoluciona, cambia de colores y formas pero sigue
su camino con tanta fuerza como la risa de dos hermanos en lo
alto de una montaña nevada; el lugar donde unos pasan a ser la
estrella que guía las noches complicadas de pesadilla,
mientras que otros son el arco iris que saca la mejor sonrisa
incluso en los días en los que la tormenta arrecia con la fuerza
del dolor que oprime el pecho hasta inutilizar el corazón.