1. La importancia de alcanzar el equilibrio
¿Llevar una vida saludable tiene que ver tan solo con una buena alimentación? La mayoría de las
personas piensa que llevar una vida sana es solo tener una alimentación correcta, pero se olvidan
de los demás factores que influyen en esto.
Nuestra vida está compuesta de diferentes áreas que se refuerzan entre si para lograr un
balance. A menudo ocupamos la mayoría de nuestro tiempo en solo un par de estas restándole
importancia a las demás, pero para vivir una vida equilibrada no solo basta con concentrarnos en
la alimentación o en lo físico, es importante también prestar atención al aspecto social y
psicológico de nuestras vidas. Según la OMS, salud es: ''Estado completo de bienestar físico, social
y mental y no solamente la ausencia de enfermedad''.
Como bien dice la definición, es un estado completo de bienestar, en donde el pilar fundamental
de esto es que exista un balance entre estos tres factores, o sea, un equilibrio entre una buena
alimentación y un buen estado físico y mental, para poder desarrollar de la mejor manera las
actividades que se nos presentan a diario.
Ahora, centrándonos solo en el aspecto alimenticio, ¿Los alimentos son ''buenos'' o ''malos''? La
respuesta es no, ningún alimento puede ser clasificado entre una de estas categorías, ya que,
depende de la forma y la cantidad en que se consuman, debe existir un equilibrio, para ir así
creando poco a poco los buenos hábitos alimenticios. Esta debe ser variada, adecuada, suficiente,
estar bien distribuida y ser higiénica. Si consumimos alimentos correctos podemos protegernos de
muchas enfermedades, como las afecciones cardíacas o algunos tipos de cáncer. Los problemas
que existen actualmente sobre la dieta diaria se debe a una ingesta excesiva de grasas saturadas,
carbohidratos elaborados y un consumo insuficiente de fibra.
Los consejos para llevar una buena alimentación son conocidos por la mayoría de las personas,
siendo estos: tomar 8 vasos de agua al día, consumir frutas y verduras, consumir legumbres y
pescados y reducir el consumo de sal, que favorece la retención de líquidos.
La actividad física es el otro factor de gran importancia para alcanzar el tan anhelado equilibrio
porque va unido con el bienestar mental. Al hacer deporte estamos mejorando nuestro estado
físico y nuestra condición nutricional, pero a la vez mejoramos nuestro estado mental, al secretar
distintas hormonas como la adrenalina, noradrenalina, cortisol y tiroxina, que al ser liberadas nos
sentimos más ''relajados'' o más ''tranquilos''. Es recomendable realizar media hora de ejercicio al
menos tres veces por semana, ayudando a prevenir enfermedades como la obesidad, diabetes y
presión alta. Además, el ejercicio físico ejerce efectos beneficiosos sobre el corazón y sistema
circulatorio en general.
Pero, ¿y el aspecto social que rol juega? Mantener una buena relación con las personas que nos
rodean es fundamental la hora de querer alcanzar el equilibrio, esto nos ayuda principalmente en
el ánimo, sintiéndonos así más ''optimistas'' al estar de mejor humor. Estar en armonía con el
resto, aunque algunas veces parezca difícil, ayudará para sentirnos mejor con nosotros mismos.
Este aspecto es muchas veces dejado de lado, debido a la gran utilización de las redes sociales,
principalmente de ''facebook''.
2. Pero además de estos factores, la higiene personal y de nuestro entorno son claves para el
desarrollo de una vida saludable, al evitar estar en contacto con algunos virus y bacterias para
poder evitar el contagio de ciertas enfermedades, siendo las más frecuentes las que tienen que
ver con el mal lavado de los alimentos, como el cólera.
Tener una vida balanceada depende únicamente de cada persona, ya que se requiere de mucho
esfuerzo, dedicación y fuerza de voluntad. Alcanzar el equilibrio nos ayuda a gozar de una buena
salud y calidad de vida.