Para generar atención y motivación en los estudiantes, el educador físico debe poseer competencias como la orientación hacia el logro, sensibilidad interpersonal, comunicación asertiva, liderazgo y habilidad para la negociación y mediación de conflictos. Esto implica escuchar a los estudiantes, brindar apoyo, impulsarlos a lograr sus metas, y crear un ambiente donde no se sientan excluidos. De esta forma, el educador puede despertar la curiosidad de los estudiantes y hacer que se sientan importantes e interesados