La fiebre aftosa es una enfermedad viral muy contagiosa que afecta a bovinos, porcinos y otros rumiantes causando ampollas en la boca y patas. Se transmite a través de la saliva, leche u otros fluidos y puede propagarse rápidamente entre rebaños. Su diagnóstico se realiza mediante RT-PCR y la prevención incluye controles sanitarios estrictos y vacunación periódica establecida por el SENACSA.