El germanio es un metal gris con un número atómico de 32. Facilita el movimiento de oxígeno a través de las membranas celulares y se absorbe en el intestino delgado, alcanzando su máximo nivel en la sangre después de 3 horas. No se almacena en el cuerpo y no es tóxico. Desempeña funciones como proteger contra los radicales libres, favorecer la producción de anticuerpos e incrementar el transporte de oxígeno a los órganos. Su deficiencia puede provocar infecciones, falta