Durante el embarazo, la nutrición es fundamental para cubrir las necesidades nutricionales de la madre y el feto en crecimiento. En el primer trimestre, cualquier déficit de nutrientes puede provocar alteraciones irreversibles en el feto. En el segundo trimestre, el aporte calórico es esencial para apoyar el crecimiento fetal y establecer reservas de grasa en la madre para la futura lactancia. En el tercer trimestre, la demanda de energía y nutrientes aumenta debido al rápido aumento de peso del feto.