La Escuela Nueva se opone a una pedagogía basada en la memorización y el autoritarismo, en lugar de centrarse en los intereses del niño y su actividad. Se inspira en los principios de Rousseau. Para ser considerada Escuela Nueva, una institución debe cumplir al menos dos tercios de las 30 características descritas, como trabajos manuales, enseñanza basada en hechos y experiencias, y educación moral. Representantes clave fueron Rousseau, Dewey, Montessori y Cousinet.