Este documento discute la interceptación telefónica legal e ilegal y ofrece recomendaciones para los periodistas. Legalmente, un juez puede autorizar la interceptación por delitos graves, pero el "chuponeo" o espionaje de comunicaciones privadas sin orden judicial es ilegal. Los audios obtenidos de forma ilegal no deben ser la única prueba en un reportaje. Los periodistas no deben generar un mercado para este material ni dejarse utilizar por fuentes cuyas intenciones no están claras.