El documento analiza las limitaciones de las teorías actuales de organización escolar y propone un enfoque alternativo centrado en la micropolítica de la escuela. Argumenta que las escuelas tienen metas diversas y están influenciadas por conflictos ideológicos entre profesores. Propone estudiar aspectos como el control del trabajo, la toma de decisiones y los intereses de los grupos en lugar de considerar a la escuela como una organización racional con metas consensuadas.