El documento describe las manifestaciones de la risa en la Edad Media y cómo ésta era vista de manera diferente en la cultura popular y en la cultura oficial de la Iglesia. La risa estaba excluida de las esferas oficiales pero era una forma de liberación en el carnaval y en otras celebraciones populares. El carnaval ofrecía una visión alternativa y optimista del mundo frente a la seriedad de la cultura religiosa dominante.