La laparoscopia es una técnica quirúrgica mínimamente invasiva que permite examinar visualmente el abdomen a través de un endoscopio. Requiere equipamiento tecnológico avanzado como cámaras, fuentes de luz e insufladores de dióxido de carbono. Aunque menos traumática que las cirugías abiertas, la laparoscopia tiene una curva de aprendizaje exigente y depende de la tecnología disponible.