Los incas creían que sus orígenes eran divinos y míticos, descendiendo de dioses. Se remontan al año 1200 d.C. aproximadamente, con su centro en Cusco, desde donde gobernaron un imperio de más de 40,000 km que incluyó partes de los Andes. Según la leyenda, los fundadores Manco Cápac y Mama Ocllo habrían salido del lago Titicaca para establecer Cusco.