El documento argumenta que no es posible una revolución educativa sin la integración de herramientas tecnológicas en el aula. Explica que las herramientas tecnológicas son vitales para el proceso de enseñanza y aprendizaje al permitir enseñar de una manera más realista y lograr los objetivos planificados de manera más efectiva. Menciona algunas herramientas tecnológicas como el cloud computing, Facebook y Twitter que han mejorado la comprensión de las lecciones y facilitado el acceso a los materiales