El documento describe la evolución del entendimiento del movimiento de los cuerpos celestes desde la antigüedad hasta la época moderna. Aristóteles y Ptolomeo consideraron un modelo geocéntrico, mientras que Copérnico propuso después un modelo heliocéntrico. Kepler descubrió que las órbitas planetarias son elipses y formuló sus leyes del movimiento planetario. Newton explicó luego que la fuerza que causa estos movimientos es la gravedad universal.