El documento discute la importancia de la amorosidad en la práctica docente. Señala que sin amor, el trabajo del docente pierde su significado. También destaca la necesidad de compromiso del docente con la integración social de los estudiantes y con relacionarse, colaborar y convivir con ellos. Finalmente, enfatiza que la capacidad de decisión del docente es absolutamente necesaria para enseñar virtudes como la decisión a los estudiantes.