La novela corta de Franz Kafka, La Metamorfosis, narra la historia de Gregor Samsa, quien despierta una mañana convertido en un enorme insecto. Atrapado en su nueva forma, Gregor intenta comunicarse con su familia, quienes se horrorizan y rechazan su nueva apariencia. Con el tiempo, Gregor se debilita y muere solo, mientras su familia abandona la casa donde vivían.

2. • Un joven viajante de comercio despierta una
mañana luego de un sueño intranquilo
convertido en un enorme insecto. Gregor Samsa
es el protagonista de esta transformación
monstruosa inventada por Franz Kafka y
considerada una novela fundamental de la
literatura del siglo XX.
El artista argentino Luis Scafati realizó una
versión ilustrada -aún inédita- de esta obra
• http://www.clarin.com/diario/especiales/galeria/s
cafati/html/recep.htm

3. Una mañana,
Gregor Samsa despertó de un sueño intranquilo y se encontró
convertido en un enorme insecto.

4. ¿ Qué me ha ocurrido? pensó Gregor. No era un sueño.

5. Innumerables patas, lastimosamente delgadas en comparación
con el grosor ordinario de sus piernas, se agitaban indefensas
ante sus ojos.

6. - Gregor, ábreme. Te
lo suplico. Pero
Gregor no pensaba
abrir y se felicitaba
de no haber
renunciado al hábito
de encerrarse en su
cuarto por la noche...

7. S in duda, a
través de la
puerta de madera
no se advertía el
cambio de su
voz...

8. Desde el vestíbulo alargó el brazo derecho en dirección a la escalera, como si
allí lo aguardara una redención sobrenatural.

9. La madre juntó las manos y miró primero al padre, luego avanzó dos
pasos en dirección a Gregor y cayó...

10. Pero Gregor carecía aún de
práctica en la marcha hacia
atrás y retrocedía con mucha
lentitud.

11. Lo habitual a esa hora, era que el padre leyera en
voz alta, a la madre y a veces también a la
hermana, el diario de la tarde.

12. A l comienzo no lo vio, pero al distinguirlo bajo el canapé,
se sobresaltó tanto, que volvió a cerrar la puerta desde
afuera.

13. A demás dejó en el suelo la escudilla -que sin duda iba a
quedar destinada a Gregor- pero esta vez llena de agua.

14. Porque a diferencia de Gregor, la muchacha era muy
aficionada a la música y tocaba el violín con gran
sentimiento.

15. Ya no divisaba el hospital de enfrente, cuya vista tantas
veces había maldecido... Habría podido creer que su
ventana asomaba a un desierto.

16. El se mantenía bajo el
sillón, tembloroso, seguro
de que ella le habría
ahorrado aquella
mortificación...

17. ... A l volverse y verlo allí, la muchacha se sobresaltó; un
frasco cayó al suelo, se quebró y un fragmento hirió en la
cara a Gregor.

18. Era inútil seguir corriendo, pues el padre estaba decidido a
bombardearlo.

19. Y Gregor sentía que su herida de la espalda volvía a doler,
cuando la madre y la hermana regresaban...

20. Sus piernas, se agitaban indefensas ante sus ojos

21. A traído por la música, Gregor se
había atrevido a avanzar un poco
y ya asomaba la cabeza por la
puerta que daba a la sala de
estar.

22. -¡ S r. Samsa!- gritó, de pronto, el pensionista del medio y
señaló con el índice en dirección a Gregor, que avanzaba
con lentitud.

23. Ahora todos lo miraban en silencio
y con tristeza

24. Permaneció en ese estadio de insensibilidad, hundido en
serenas meditaciones, hasta que el reloj de la torre dio las
tres de la mañana.