El documento discute las diferencias entre personas y animales. Explica que las personas están dotadas de un cuerpo, pero también pueden pensar y querer a través de operaciones mentales como la inteligencia y la voluntad. Estas capacidades mentales van más allá de la sensibilidad física y requieren de un espíritu único e indivisible en cada persona. Ser persona implica ser libre a través del pensamiento de la verdad y el querer del bien.