El documento compara el positivismo y el falsacionismo popperiano. El positivismo se basa en el método inductivo y la verificación empírica, mientras que Popper critica la inducción y la verificación, proponiendo en su lugar que una teoría puede ser falsada pero no verificada, y que el progreso científico viene de refutar teorías existentes. Popper también establece un criterio de demarcación entre ciencia y no-ciencia basado en la refutabilidad.