Reforma a Ley General de Salud (Objeción de Conciencia)
1. Cámara de Diputados
aprobó reformas a la
Ley General de Salud
para garantizar
objeción de conciencia
Artículo extraído de: EL ECONOMISTA
2. El pleno de la Cámara de Diputados aprobó reformas a la Ley General de Salud para garantizar la
objeción de conciencia por parte de médicos y profesionales de salud, en aquellos casos de
intervención médica que contravengan su libertad de conciencia.
Por 313 votos en favor, el pleno de la Cámara Baja aprobó el dictamen de la Comisión de Salud, con
proyecto de decreto por el que se adiciona el artículo 10 Bis de la Ley General de Salud, el cual fue
turnado luego al Senado de la República para su codictaminación.
Se permite a doctores y personal de enfermería, ejercer su derecho a la objeción de conciencia,
mediante el cual, un doctor o personal de enfermería podrá excusarse de participar en tratamientos,
programas u otras actividades que contravengan su libertad de conciencia, con base en sus valores o
principios éticos.
Especifica que “cuando se ponga en riesgo la vida del paciente o se trate de una urgencia médica, no
podrá invocarse la objeción de conciencia”.
Lo anterior implica que ningún doctor ni personal de enfermería podría hacer uso de la objeción si la
vida está en riesgo o se trata de una urgencia médica.
La diputada Norma Edith Martínez (PES), promovente de esta reforma, aseveró que no se pone en
riesgo la vida de las personas.
La diputad Cecilia Soro (PRD) afirmó que en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) no
hay un solo caso de personal de salud, médicos y enfermeras, que hayan acudido a pedir protección,
porque se les ha negado el derecho a la objeción de conciencia.
Sin embargo, reveló que en la Comisión de Arbitraje Médico hay 795 expedientes de pacientes,
testigos de Jehová, que acudieron para demandar que se les haya violado su derecho a la no
trasfusión, además de 50 médicos anestesiólogos que no han querido participar en esas
intervenciones quirúrgicas porque podrían ser demandados.
Afirmó que “esta ley no atiende a un problema y en cambio, se abre la puerta a un problema muy
importante, especialmente en las clínicas rurales, donde hay poco personal médico y donde la
Secretaría de Salud no puede tener personal no objetor de conciencia”.