El documento critica las teorías psicológicas y de crítica de arte que han tratado de explicar los orígenes del arte y del artista. Argumenta que estas teorías reducen al artista a un objeto de estudio y analizan superficialmente sus obras para llegar a conclusiones sobre su psique, lo cual es erróneo. También señala que el enfoque común de estudiar el arte es demasiado superficial y limitado.