El documento trata sobre la soberanía alimentaria. Define la soberanía alimentaria como el derecho de los pueblos a alimentos nutritivos y culturalmente adecuados producidos de forma sostenible. Da prioridad a las economías locales y a la agricultura familiar sobre las empresas internacionales. También promueve el concepto desarrollado por Vía Campesina de priorizar la producción, distribución y consumo alimentario de manera sostenible.