El relieve se refiere a las irregularidades en la superficie terrestre, como montañas y valles. Los procesos internos de la Tierra y factores externos como la erosión y el intemperismo modelan el relieve continental y oceánico a lo largo del tiempo. El relieve continental incluye montañas y cordilleras, mientras que el relieve oceánico comprende la plataforma continental, el talud continental, la llanura abisal y las fosas oceánicas.