El documento contrasta la educación del pasado con la del futuro, señalando que mientras en el pasado las clases eran presenciales con maestro al frente y los estudiantes en el salón, en el futuro la educación será más virtual e incorporará el uso de tecnologías tanto en el aula como en casa, con trabajos en grupo y cursos virtuales, además de comunicación a través del correo electrónico.