El documento discute la discriminación y desigualdad que existen en la sociedad colombiana. A pesar de más de 200 años de independencia, Colombia aún no ha podido cambiar su cultura de rechazar y criticar a los demás por sus características. El documento también destaca la discriminación de género y la pobreza que enfrentan los estudiantes y maestros. Resalta las contribuciones de los afrocolombianos a la cultura del país y argumenta que todos debemos ser tratados como iguales sin discriminación.