Este documento describe la tensa relación entre el Papa Bonifacio VIII y el rey Felipe IV de Francia. Felipe acusó a Bonifacio de herejía y corrupción para debilitar su autoridad. En 1303, Felipe envió a Guillermo de Nogaret a Anagni, donde apresó y humilló a Bonifacio, quien murió poco después. Este incidente marcó el fin de la supremacía del papado en la Edad Media y el inicio del cautiverio de Aviñón bajo la influencia francesa.