1. Para nosotros el uso de la oralidad en las aulas presenciales o virtuales son exactamente los
mismos. Podría sin embargo recalcarse el hecho de la modificación de la conducta que ambos
contextos ejerzan en el estudiante. Es decir, que del mismo modo en que un estudiante se sienta
más cómodo dando su opinión de manera presencial frente a todos sus compañeros y profesores,
otro estudiante puede sentir tanta inseguridad como la seguridad del estudiante en el primer
caso.
Es decir que en lo que respecta a la oralidad como tal en ambos contextos, nuestra opinión es
que si en un aula presencial, el oído es prácticamente la base de la oralidad, en las aulas virtuales
se sustituye (al menos intenta), el oído por el ojo.
La oralidad en aula La oralidad en aula virtual
presencial
El discurso del estudiante podría verse más restringido o menos, en
tanto que los índices de tensión de un estudiante, puede elevarse en las
clases presenciales y elevarse en aulas virtuales. (Vergüenza,
inseguridad, dificultades, inconvenientes con su maestro y-o sus
compañeros.).
la oralidad en ambos contextos responde a una relación directa entre
emisor-texto-receptor.
La oralidad es más espontánea, incluso podría decirse más viva en tanto
que al intercambiar los discursos de diferentes entes (Estudiantes,
profesores, incluso las voces electrónicas etc.), se enriquece.
La comunicación se torna pura, pues se materializa sonoramente.
La oralidad podría ser utilizada por el maestro para desarrollar
contenidos académicos
Se puede realizar un uso de la oralidad de manera individual y social
también.
Para concluir, la oralidad cambia su forma, muta en otra cosa pero no por eso es mejor o peor.