ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
Origen jardines infantes Argentina
1. Provincia de Buenos Aires
Dirección General de Cultura y Educación
Instituto superior de Formación Apoyo y Perfeccionamiento Educativo
DIPREGEP 2987
Profesorado de Educación Inicial
La investigación acción en el ambiente educativo
Sergio Pérez Álvarez.
Informe para la investigación exploratoria: “Origen de los
jardines de infantes en la República Argentina”
Carabajal Vanina
Federico Juliana
Galliano Julieta
2014
2. Introducción:
Realizando el profesorado de nivel inicial en la institución I.A.P.E, cursamos
una materia llamada investigación acción en el ambiente educativo llevada a cabo
por el profesor Sergio Pèrez Àlvarez. Quien nos delegó a realizar dicho trabajo,
con el fin de hacer una investigación en el campo educativo.
Quienes conforman este grupo: Federico Juliana, Carabajal Vanina y
Galliano Julieta trabajaremos todo el año juntas para lograr la investigación. Por
cuestiones de horarios decidimos agruparnos, además de ya tener una
metodología específica para llevar a cabo actividades y trabajos como el mismo.
Teniendo la posibilidad de elegir el tema para abordar el grupo en su
totalidad decidió optar por el origen de los Jardines de Infantes en la República
Argentina ya que es la primera institución educacional y socializadora a la que
concurren los sujetos (niños). El Nivel Inicial promueve una relación estrecha
entre el grupo familiar en primer lugar, y a la comunidad en general, como
participantes activos del proceso de educación del niño. Las tareas se orientan
para favorecer el desenvolvimiento de todas las apetencias y potencialidades
propias de su edad, por ello es importante conocer como fueron evolucionando
estas instituciones a través del tiempo y quienes fueron sus protagonistas.
Inicio de los jardines de infantes en Argentina.
• Entrada a la casa donde funcionara por primera vez el jardín de infantes
creado por Rosario Vera Peñaloza -
En 1875 la sanción de la Ley de Educación de la provincia de Buenos Aires,
estipula como función de los Consejos Escolares de Distrito, la creación de
escuelas y de jardines de infantes. Es en 1885, que se funda en la ciudad de La
Plata, el primero de ellos, segundo del país, esta señal de un Estado presente se
constituye en punta de lanza para el crecimiento del nivel.
Con la sanción de la Ley de Educación Común Nº 1.420 de en 1884, inspirada en
el proyecto educativo de la “generación del ‘80”, que en el art. 11, establece la
creación de "uno o más jardines de infantes en las ciudades donde fuera posible
dotarlos suficientemente", se incorpora a los Jardín de Infantes al sistema
educativo argentino, quedando de esta manera en manos de las jurisdicciones la
posibilidad y decisión de crearlos, junto con la ley el Estado nacional impulsa la
creación de jardines de infantes, anexos a las escuelas normales formando parte
de su Departamento de Aplicación.
3. Por iniciativa de Domingo Faustino Sarmiento, se encomendó su organización a la
Profesora Sara Chamberlain de Eccleston, maestra norteamericana traída por
Domingo Faustino Sarmiento, para dirigir la Escuela Normal de Paraná donde
funda en 1884 el curso de Profesorado en Kindergarten, en el inicia la formación
de maestras para jardín de infantes en la Escuela Normal de Paraná, Intentaba
difundir los principios froebelianos y sus Dones, la diferenciación en la formación
de los docentes que trabajan en el jardín de infantes es constitutiva del Nivel y su
sustento convertido en bastión de lucha en los distintos períodos históricos,
comenzó así la formación de profesoras para el Nivel, y anexa un Departamento
Infantil iniciando las clases el 4/8/1884, en el que sólo se matricularon 15.
El Jardín de Infantes de la Escuela Normal “Mariano Moreno” es el cuarto Jardín
de Infantes fundado en la República Argentina, las autoridades en el momento de
su creación fueron: Presidente de la Nación el Dr. Miguel Juárez Celman, ministro
de Justicia, Culto e Instrucción Pública el Dr. Filemón Posse; Gobernador de la
Provincia el Sr. Clemente Basavilbaso e intendente Municipal el Dr. José Scelzi,
era septiembre de 1887, cuando se recibía en la escuela una nota que decía: “Fue
creado por decreto de fecha: 27-9-1887 un jardín de infantes anexo a las Escuelas
Nacionales Presupuesto año 1887”. Galería de imágenes.
Frente de la casa donde funcionara por primera vez el jardín de infantes creado
por Rosario Vera Peñaloza.
En 1887, Antoinette Choate crea el primer jardín en Santa Fe, en 1896 María E.
Gutiérrez y María J. Rodríguez en Santiago del Estero.
Al finalizar 1891, habían egresado del Kindergarten Normal 13 profesoras, la
mayoría de las cuales regresaron a sus provincias de origen para instalar en ellas
los primeros jardines.
En la Escuela Normal Superior, la provincia de Buenos Aires “Presidente Roque
Sáenz Peña” Comienza a funcionar el jardín de infantes, en el año 1888 se fundó
el jardín de infantes. Se implementa el nuevo plan de estudios según el decreto
del 31/12/1887. Fue su cuarta directora la Srta. Rosario Vera Peñaloza.
Ya en una publicación de la Escuela Normal de Paraná de 1871-1895, queda claro
que este jardín de infantes modelo, tuvo las salas pobladas por los hijos/as de las
más distinguidas familias. El sistema educativo moderno considerado un elemento
político clave en la conformación del Estado Nación argentino, incluye en sus
comienzos, al jardín de infantes como una posibilidad para algunos. El jardín de
infantes, surge entonces, en el escenario de principios de siglo XX, como un
espacio selecto quedando lejos aquel ideal homogenizador que presumía
Sarmiento.
4. En 1897, comienza a funcionar en la Capital Federal la "Escuela Especial de
Profesorado en Kindergarten" con la dirección de Sara Eccleston; pero, en 1905
es clausurada y convertido en escuela normal para maestros.
Ingreso a la Antigua Casa del director de la Escuela Normal N° 1 de La Rioja
donde funcionó el jardín de infantes hasta 2008
El 17 de marzo de 1898, nada más y nada menos que la ilustre Maestra de la
Patria “Rosario Vera Peñaloza” lleva a cabo la tarea de crear así el primer jardín
de infantes de la provincia de La Rioja, en la casa que le alquila a su tía Vera
Vallejos, ubicada en Yrigoyen 21 (antiguo Cuyo), siendo su primera maestra la
propia fundadora, con una escasa matrícula, la vida institucional sólo se vio
interrumpida una vez, luego de los tres meses de funcionamiento, pero por la
férrea voluntad de su gestora reanuda sus actividades recién exactamente a un
año de comenzar a funcionar, cuando oficialmente se le otorga un subsidio
nacional para la compra del mobiliario y recursos adecuados, ya con una matrícula
considerable de 46 alumnos, hace los trámites para que le permitan funcionar en
la histórica Escuela Normal Mixta utilizando el aula de la esquina ubicada en
Catamarca y Bustos, y es así como a catorce años de su creación incorporaba el
jardín de infantes anexo.
En el mismo año Pía Didoménico, en Jujuy. Más tarde, Custodia Zuloaga lo hizo
en Mendoza. Este grupo de docentes, discípulas de Clara Eccleston, colaboraron
con ella en la difusión de los beneficios de la educación preescolar.
Rosario Vera Peñaloza nació el 25 de diciembre de 1873 en el pueblo de Atiles,
departamento Juan Facundo Quiroga, de La Rioja. Era descendiente de una
familia tradicional vinculada a la historia política y militar riojana. Sus padres fueron
Don Eloy Vera y Mercedes Peñaloza. Quedó huérfana y su tía Jesús Peñaloza
Ocampo, se hizo cargo de sus estudios primarios, que finalizaron en la Escuela de
las hermanas Villascuse, en San Juan.
Cursó la carrera de Magisterio en la Escuela Normal de La Rioja, fundada en 1884
por las maestras norteamericanas Annette Haven y Bernice Avery. Luego fue a
Paraná y cursó el Profesorado que allí funcionaba. Al finalizarlo, viaja a Paraná
donde estudia de Dibujo y Pintura (con de la Cárcova), Trabajo Manual, Artes
Decorativas, Modelado, Tejido en Telares, que después volcaría en la creación de
material didáctico, es allí donde conoce y entabla amistad con Sara Chamberlain
de Eccleston, .
5. Frente del edificio propio donde funciona en la actualidad y desde 2012 el jardín
de infantes histórico “Rosario Vera Peñaloza”
Fue directora fundadora de la Escuela Argentina Modelo con el Dr. Carlos Viedma,
e inspectora de Enseñanza Secundaria, Normal y Especial, cargo con el que se
jubiló en 1926, por razones de salud.
Continuó viajando por el país, dictando conferencias y cursos y en 1931 organizó
el Museo Argentino para la Escuela Primaria en el Instituto Félix Bernasconi. En el
mismo, cristalizaba las ideas de Joaquín V. González, a las que ella adhería: la
geografía como ciencia central, que globaliza los fenómenos físicos, biológicos,
históricos, económicos y sociales, para una educación patriótica y nacional. De
este Museo, Rosario Vera Peñaloza dejó matrices de todas sus piezas, previendo
que los maestros pudieran extraer copias para su uso y difusión.
Dictó numerosos cursos destinados a la didáctica del jardín de infantes. En 1950,
cuando se encontraba dictando uno de ellos en Chamical, La Rioja, se enfermó y
debió internarse, falleciendo el 28 de mayo.
Es por ello que desde 1971, se recuerda como Día Nacional de los Jardines de
Infantes, este homenaje a su memoria, fue instituido el 15 de octubre de 1971 en
la 6ª Jornada de Educadores de Nivel Prescolar reunido en Santa Fe, allí se
decidió instaurar esta fecha para conmemorar lo hecho por Rosario Vera Peñaloza
en pos de la educación en general, pero principalmente en el Nivel Inicial, aunque
nunca tuvo sustento legal, ni provincial, ni nacional, es este un anhelo de todo el
personal de la institución que se honran en ser sus sucesoras, que se
institucionalice a nivel nacional tal fecha.
Cabe destacar que al ser el “Día de los Jardines de Infantes” es por ende el día de
todos cuantos se encuentran involucrados en las instituciones: niños, personal de
servicios, padres, docentes y directivos.
Concepciones Pedagógicas de Rosario Vera Peñaloza
Su obra es recopilada y ordenada por Martha Salotti (designada en su testamento
a tal efecto).
Martha Salotti (en 1969) se refiere a la acción de Rosario Vera Peñaloza en favor
del Nivel Inicial y dice: "Rosario Vera Peñaloza pertenece a la generación del
setenta, junto con Montessori, Decroly, Audemar y Lafende, Agazzi, quienes al
empezar el siglo XX estaban en la plenitud de los 30 años. Los imperativos de
esta época hicieron que este grupo pusiera su atención en la educación de los
6. niños menores de 6 años, como si previeran la importancia que el Jardín de
Infantes adquiriría en un futuro no lejano."
Ante la crisis que atravesaba el Nivel Inicial alrededor de 1900, Rosario V.
Peñaloza se planteó la siguiente hipótesis: si las bases del Jardín establecidas por
Froebel eran sólidas, uno de los motivos pedagógicos por los que desaparecería
el Jardín serían la metodología y el material didáctico.
Esta educadora, impregnada del positivismo pedagógico en que se había
formado, equiparaba las ciencias de la educación y las ciencias de la naturaleza
(Aldecua, Francisco, 1990)
. Su concepción del hombre, de la vida y del conocimiento integral del educando,
se basaba en la observación, la experimentación y la inducción. Estos principios
se reflejan en su método de Enseñanza Práctica de la Geometría, el Museo
Argentino y su material didáctico que creó para el Jardín de Infantes.
Para recrear el material didáctico de los Jardines, hizo un estudio exhaustivo del
material froebeliano y montessoriano. Llegó a la conclusión de que no era la
solución un nuevo material ya que volvería a envejecer, por lo que se preguntó
entonces por los elementos estables del Jardín: el niño y el maestro. Sería
necesario entonces, dedujo, centrar en ellos el porvenir del Nivel, por lo que el
material no podía ser de repetición sino de creación. Según Martha Salotti,
Rosario estaba dotada de genio pedagógico, pero como muchos creadores, era
reacia a escribir. Sus ideas, investigaciones y trabajos giraban en torno a algunos
ejes, claves en su concepción pedagógica.
a. movilidad y movimiento;
b. trabajo manual creador;
c. escenografía
.
a. Movilidad y movimiento
Rosario Vera Peñaloza sostenía que el Jardín se regía por el principio de
actividad. “Hay actividad no sólo en el movimiento (decía) sino también en la
inmovilidad del niño”, “cuando pone en marcha los resortes del alma, cuando
escucha o cuando tiene algo que le interesa en sus manos."
Rosario consideraba, a la mano: eje y centro de todas las actividades,
adjudicándole una misión más amplia que la de repetir modelos para ejercitar la
coordinación motora. La mano, era para ella, activadora de la función cerebral y
7. ejecutora del pensamiento. Su preocupación consistía en la educación de la mano
a través de la creación (no de imitación o repetición).
b. Trabajo manual creador
A la manipulación del material, actividad espontánea del niño, Rosario V.
Peñaloza otorga un objetivo afectivo. El cerebro y la mano en constante
interrelación, en función de creación, representa su concepción pedagógica.
Según esta idea, el material didáctico y las actividades que se proponían al niño
debían reunir características fundamentales (Rosario decía: para"defender al
Jardín de las improvisaciones"). Esos requisitos los detallaba así:
1. Debe partir de bases científicas, para no quedar librado a la habilidad que
puede tener o no
la maestra.
2. Debe ser de fácil comprensión.
3. La ejecución debe ser rápida por su sencillez y comprensión.
4. Cualquier clase de material puede ser utilizado para ello.
5. Debe tener condiciones estéticas, llevar a la belleza.
6. En la ejecución no debe utilizarse ninguna clase de instrumento, salvo la mano.
7. Debe abrir la puerta a la creación para que la maestra y el niño, se sientan
autores y no meros repetidores.
8. Debe dejarse al niño plena libertad de interpretación y de ejecución, tanto en
elección del material, como en la composición del trabajo.
Rosario Vera Peñaloza centra la metodología del Jardín en la preparación del
material, partiendo de la base que la didáctica debía girar en torno a la actividad
creadora. No como clase de "Trabajo Manual" en media hora del horario (una
actividad de los Jardines de Infantes entonces), sino que se debía implementar
una didáctica integral centrada en la "actividad creativa de la mano".
En sus notas, Rosario sugiere que "el maestro debe dominar muchas técnicas
para preparar el material didáctico necesario en el medio en el que le toque
actuar". Ese material, señala, debe "poner al niño en contacto con el mundo que lo
rodea, por lo que tendrá forma, color, proporciones, sonoridad, a veces, y otras
olor, sabor y consistencia. Su superficie puede ser lisa, áspera, suave".
8. Estas formas deben adaptarse al juego (sostenía), por lo que debemos proponer
muchos juegos para que el niño salga de sí, conozca el mundo y nosotros
podamos conocerlo a él. Con estos criterios Rosario Vera Peñaloza realiza un
adaptación y recreación del material didáctico de los Dones Froebelianos, que se
conoce como Variaciones Argentinas del equipo Froebeliano. Ella misma en sus
notas, mientras creaba este material, explica: (material recopilado por Martha
Salotti).
"Froebel creó trece dones que comprenden tres series de formas:
1. Una serie de cuerpos sólidos cuya utilización o aplicación práctica se hace
mediante juegos de construcción y de distinción visiva de colores.
2.Una serie de figuras planas, geométricas a las que llaman formas de vida que
son imitación de variedad de cosas de la naturaleza, para juegos análogos,
imitación o identificación de figuras, etc.
3.Serie de elementos con los cuales pueda contornear figuras, como hilos,
alambres, palitos y hasta semillas, representativos de puntos para hacer figuritas
en variedad de juegos. Cuerpos, figuras, hilos que equivalen a volumen,
superficie, contorno."
Sin embargo Rosario Vera Peñaloza no se circunscribe a Froebel. Dice: "El
material de los Jardines no puede ser único. Los pedagogos que se han ocupado
de este asunto tuvieron que crear algún material para mostrarnos los medio por
los cuales puede llegarse a los propósitos buscados. Tienen así el importante
valor de señalarnos puertas por las cuales podemos penetrar para seguir los
cambios señalados. En este caso, como podemos educar los sentidos, la mano,
dirigir las primeras impresiones, forjar los primeros sentimientos, propender al
desarrollo físico, intelectual y moral; todo lo cual debe ser cuidado desde la cuna
"y añade. "Si los fines son amplios, los recursos o los medios de acción deben
serlo más".
Su preocupación residía en que los docentes pudieran, hábil y creativamente,
preparar los materiales didácticos. Por ello se dedicó a la "simplificación de las
técnicas de la forma" con un doble propósito: preparar al maestro para que pueda
ejecutar el material y los elementos para que el niño trabaje con creatividad. Se
lanzó, entonces, a la tarea de divulgación y dictó clases teórico-prácticas para todo
el país. Dice Martha Salotti: “Suman millares los maestros que aprendieron con
ella y que se sorprendieron al verse realizar una obra propia y no una mera
repetición de lo aprendido; sorpresa que los impulsaba a la acción acrecentada
por el goce inefable de crear. Y precisamente, en esa alegría sorprendida, basaba
ella la renovación permanente del Jardín auxiliar por un material siempre nuevo.
9. Tenía el don de dar con tanta naturalidad sus creaciones al primero que se
acercase a pedirle, que quien lo recibía se iba gozoso creyendo ingenuamente,
que lo que le acababa de dar lo habría sacado de algún libro de los muchos que
llenaban su mesa, ignorando que ella le había puesto en sus manos con profunda
humildad, un verso perfecto del que era autora. En esa forma silenciosa y
permanente fecundó la escuela, como el polen invisible fecunda el bosque llevado
por el viento".
c. Escenografía
Para Rosario Vera Peñaloza, ésta adquiría el valor de una palabra-frase. Ella
sostenía que una vez realizado el material, "había que llegar a la escenografía".
Su intuición y pragmatismo pedagógico, la alejaban de la teorización, lo que
dificultaba interpretarla. Dice Martha Salotti: "nunca supimos qué significaba esta
expresión (escenografía) hasta que llegó el momento de organizar una exposición
del material didáctico que preparaban sus alumnas-maestras. "Rosario Vera
Peñaloza solicitó, en esa ocasión, a sus alumnas, que desarrollaran un tema con
el material, del que "había centenares de modelos, todos diferentes". La consigna
que les dio fue que al exponerlo, cada maestra debía responder a las preguntas"
¿Qué hice? ¿Con qué lo hice? ¿Para qué lo hice?. Continúa narrando Martha
Salotti: "El día de la exposición, aquello fue una verdadera revelación. Íbamos de
trabajo en trabajo (muchos habían sido preparados por equipos), formulando las
tres preguntas, cuyas respuestas iban trabajando nuestras almas". Con la
enumeración de las acciones realizadas, nos dimos cuenta que todas las
actividades del Jardín se globalizaban en un solo trabajo, con una temática dada.
Allí entendimos que "llegar a la escenografía" era un concepto que cristalizaba el
nuevo enfoque didáctico para el jardín, que se había abierto ante nosotros”. “Ella
lo llamaba escenografía y nosotros globalización" Este concepto verapeñaloziano,
transmitido a través de las vivencias de Martha Salotti (quien sentía una profunda
admiración y respeto por la educadora riojana) es significativo aún hoy para
nuestra didáctica. Podría aplicarse al juego-trabajo, a proyectos que los alumnos
del Nivel Inicial llevan a cabo. Las preguntas planteadas por Rosario Vera
Peñaloza tienen vigencia en las etapas de la planificación y evaluación de estas
propuestas pedagógicas. Al revisar la obra pedagógica-didáctica de Rosario Vera
Peñaloza y pensar en la vigencia de su aplicación al material didáctico en función
de los contenidos del Nivel Inicial, podemos interrogarnos sobre las causas de su
escasa difusión. Una de las respuestas se encuentra en la fuerte influencia que las
propuestas pedagógicas europeas o estadounidenses tienen en nuestro medio,
impregnando tanto el material didáctico, como a las estrategias metodológicas.
Cabe destacar que la inserción de la mujer en el mundo laboral a través de la
docencia fue cuestionada en una sociedad católica y patriarcal. Rosario Vera
10. Peñaloza, otra de las mujeres que luchó por la educación denodadamente, en
1912 alertaba acerca de las consideraciones despectivas que recibían los
normalistas. El rol que se asignaba a la mujer estaba reservado a la vida
doméstica. Sin embargo, el proyecto político liberal ideado por Sarmiento, Alberdi
y Mitre encontraba en la mujer una continuidad del orden doméstico capaz de
educar a los futuros ciudadanos. En la segunda década del siglo XX, con el
advenimiento del gobierno de Yrigoyen llegaron las influencias de la renovación
pedagógica llamada Escuela Nueva. Se caracterizaba por ser respetuosa de las
diferencias, de los deseos de los alumnos/as, atentos al aprendizaje en contacto
con la naturaleza, capaces de estimular el placer por el aprendizaje, por el arte y la
libre expresión. Por ese entonces el jardín de infantes se encontraba ante el reto
de la inclusión de los niños/as provenientes de los sectores más empobrecidos. Es
en 1935 que se crea la "Asociación Pro-difusión del Kindergarten" que de alguna
manera es la que continúa la obra de la "Unión Froebeliana",La sanción en 1973
de la Ley Nacional que crea un Instituto de Jardines Maternales Zonales, un
primer intento en el paso, de la "guardería" al Jardín Maternal. Hasta el presente
esta Ley no ha sido reglamentada. La misma reconoce al jardín maternal como
espacio de cuidado y enseñanza a los niños/as de sectores más desfavorecidos,
que tendría peculiaridades como la participación de las familias y la comunidad en
el directorio y la responsabilidad de su coordinación entre los Ministerios de
Cultura y Educación y Bienestar Social.
El golpe militar del 76 supuso un punto de profundización de la "crisis de la
educación pública"; produciendo un desmantelamiento del proyecto hegemónico
"civilizatorio-estatal" vigente desde el siglo XIX". El nivel inicial logró sostener su
crecimiento hasta mediados de la década del '70 cuando sufre el embate de una
política de ajuste y de reestructuración en el marco de prácticas autoritarias y
represivas. La transmisión de saberes estaba emparentada directamente con un
modelo de sociedad y familia única, acorde a los principios de una moral que
debía impregnar a la sociedad toda. Los Diseños Curriculares, circulares técnicas,
libros que se publicaban (entre otros la Enciclopedia Práctica Preescolar), tenían
una detallada enunciación de objetivos por dominio y las sugerencias de
actividades muy bien explicitadas a fin de que los/as docentes siguieran las guías
pensadas por los técnicos.
Llega a las escuelas en 1977, el documento "Subversión en el ámbito educativo.
Conozcamos a nuestro enemigo", en el cual se detalla el modo en el que la
subversión actúa en el espacio educativo. Advierte a las direcciones y docentes
del Nivel Inicial sobre los peligros de la literatura que favorezca el exceso de
imaginación.
La circulación de algunos libros para los niños/as, la prohibición de otros, las
canciones que se podía escuchar y las que no, también daban cuenta de la época.
Existen muchas cuestiones que parte de la sociedad argentina hoy reconoce, que
desconocía. Sin embargo, casi todos los niños y niñas de esa época (al menos en
las grandes ciudades), tenían información acerca de las canciones que no se
podían cantar en la calle o en el colectivo. Estuvieron prohibidos, por dar algunos
11. ejemplos El Principito , de Saint Exupery; La torre de cubos , de Laura
Devetach; Un elefante ocupa mucho espacio , de Elsa Bornermann; las canciones
de María Elena Walsh, y los textos pedagógicos por ejemplo, de Duprat y Friztche.
Si bien el Nivel Inicial fue precisando a lo largo del tiempo su función dentro del
sistema educativo, define sus objetivos y explicita sus contenidos a través de los
Contenidos Básicos Comunes, recién a fines del Siglo XX con la Ley Federal de
Educación (1993). Cabe señalar que esta es la primera ley de educación de
carácter nacional, razón por la cual más allá de sus propuestas controvertidas
tienen el mérito de ser, como señala Adriana Puiggrós, la primera que organiza la
educación argentina.
La Ley Federal plantea la obligatoriedad de la Sala de cinco años lo que promueve
la inversión de recursos. Sin embargo, aún no se define la responsabilidad político
económico de las salas de cuatro y tres años y mucho menos del jardín maternal,
quedando delegada la responsabilidad de las creaciones a las posibilidades de
cada jurisdicción.
En el año 2005, la Ley 26061 deroga la Ley de Patronato de 1919, dejando atrás
un pasado en el que gran parte de la infancia era candidata a ser tutelada por el
Estado ante condiciones de "riesgo moral o material". De esta manera, se
estigmatizaba a los niños diferenciando a aquellos dignos de sus derechos de los
"menores" excluidos, pobres, con familias peligrosas, que los convertían a ellos
también en sujetos peligrosos, merecedores de caridad o de encierro para su
protección, lo que los llevaba a la pronta judicialización.
En el año 2006, se sanciona la Ley de Educación 26206 que reconsidera la
organización del sistema educativo argentino, reconociendo que el Nivel Inicial
comprende desde los cuarenta y cinco días hasta los cinco años de edad. Queda,
ahora sí, el Nivel jurídicamente organizado. De esta manera, se habilita otra
página de la historia que debemos escribir en primera persona en nombre de
nuestros/as alumnos/as.
12. Conclusión:
Finalizando el informe acerca de la investigación del origen de los jardines
de infantes pudimos llegar a la conclusión que los mismos aparecieron debido a
una necesidad de la población y así influencio el desarrollo en otros países.
Acerca de nuestra experiencia personal a través de este informe pudimos
informarnos más acerca del tema y llevarlo a la realidad ya que nos acercamos a
Jardines de Infantes de nuestro barrio recolectando información y agregándola al
trabajo. La comunidad nos abrió sus puertas, para conocer más de las
instituciones, sus metodologías e historia.
Por ello queremos resaltar la importancia de conocer como fueron
evolucionando estas instituciones a través del tiempo y quienes fueron sus
protagonistas.
En cuanto al impacto esperado mencionado en el diseño de la
investigación, más precisamente en el punto 9, además de dejar una copia en el
centro de documentación e investigación para la biblioteca del instituto superior de
formación docente IAPE pudimos subirlo a las siguientes páginas de internet para
aquellas personas que necesiten recolectar información sobre dicho tema.
Desde ya le agradecemos la oportunidad de poder dejarnos ser parte de
esta investigación y despertar curiosidad ante algo nuevo y desconocido.
13. Fuentes de información.
Técnicas:
Clases teórico-prácticas.
Bibliografía de Sergio Perez Alvarez sobre investigación:
- Las investigaciones exploratorias y descriptivas en las Ciencias de la
Educación. Ed. Braga. Bs As. (ediciones anteriores de librería del
colegio - Sudamericana)
- El diagnóstico de la situación educativa: sus cuatro niveles. Ed. Braga.
Bs As. (ediciones anteriores de librería del colegio - Sudamericana)
- Metodología para la elaboración de monografías y tesis. Ed. EUDEBA –
CEA. Bs As.
- Cinco cuestiones actuales en investigación educativa. Ed. Braga. Bs As
- Fichas de investigación científica a 1 a 14. IAPE. Lanús. Bs As.
- La investigación y la práctica pedagógica de avanzada. Revista
“Educación” Nº86. LA Habana. Cuba.
Temáticas:
CAHER, Sandra. Historia del jardín de infantes. En diario Página
12 del viernes 21 de junio de 2002
Vázquez Gamboa, Elvira "Jardines de Infantes", Buenos Aires,
El Ateneo, 1948.
Sarmiento, Domingo Faustino, "Educación Popular", Buenos
Aires, Lautaro, 1949.
14. Mira López, Lola y Homar, Armida: "Educación Preescolar",
Buenos Aires, Troquel, 1970
Bosch, Lydia y otros: "El Jardín de Infantes de Hoy" Buenos
Aires, Editorial Sudamericana, 1969.
http://es.wikipedia.org/wiki/Educaci%C3%B3n_preescolar