El niño entre 3 y 4 años incrementa su vocabulario y atención, disfrutando actividades motrices como caminar, correr y trepar. Le gusta jugar a ser bomberos o pilotos. Su desarrollo mental y motor están relacionados, por lo que se le deben dar estímulos que contribuyan a su desarrollo. A esta edad, las actividades deben favorecer su coordinación, reconocimiento del cuerpo, independencia e interacción social.