El documento describe las bases para la formación integral en la adolescencia, incluyendo la moralidad, el equilibrio espiritual y la orientación y el amor familiar. Señala que los padres tienen la mayor influencia en los niños y deben proporcionar valores y orientación para que los jóvenes puedan desarrollarse emocional, física y cognitivamente. También enfatiza la importancia de que los padres reciban educación sobre la adolescencia para poder guiar a sus hijos a través de ese período de cambios.