1. EL MÉTODO SILVA DE CONTROL MENTAL
Testimonio
Amado amigo-hermano Víctor:
Por medio de la presente quiero prevenirte acerca de este peligrosísimo método de
“descontrol” mental, para que lo puedas tratar en tus conferencias de Puertas Dimensionales:
Conocí al Señor hace unos 22 años a través de un negocio multinivel. Cuatro meses más tarde
estando solo en mi coche una madrugada del 23 al 24 de abril, tras leer un librito que hablaba
de la experiencia pentecostal del Bautismo en el Espíritu Santo, el maravilloso Paráclito me
concedió Su visitación en una experiencia gloriosa y dramática. A continuación tuve unos
meses de lo que yo llamo una luna de miel con el Espíritu de Jesucristo, que habitualmente
suele preceder a la luna de “hiel” o bautismo de fuego o sufrimiento, en la que Dios nos lleva
durante bastantes años, 9 en mi caso, para hacernos morir a la carne, al ego, al viejo hombre o
a nosotros mismos, como quiera que queramos definirlo. Suelo decir que el Espíritu Santo
viene para llevarnos al “hoyo” (experiencia subjetiva de la muerte y sepultura objetivas
de/con Cristo que ocurrieron hace unos dos mil años). Es solo después de esto que podemos
entrar, también por experiencia subjetiva, en la vivencia gloriosa de Su resurrección, que nos
introduce en la vida abundante o victoriosa, en el Shalom de Dios, en la Buena Tierra de
Canaán, que es “Cristo formado en nosotros”. Así accedemos a la bendita vida en el Espíritu,
de descanso, paz y gozo. Esta es la tercera esfera o dimensión espiritual en la experiencia del
cristiano.
Lamentablemente, poco después de nuestro bautismo en el Espíritu Santo, cuando somos
inmersos en una nueva etapa o dimensión espiritual (primera etapa: salvación-pascua;
segunda etapa: bautismo en el Espíritu-Pentecostés; tercera etapa: vida de resurrección-
Tabernáculos) además del Señor y nosotros, también es consciente de ello el maligno. El suele
contrarrestar con algún ataque o prueba singular. En mi caso fue el engaño del Método Silva
de Control Mental.
Recuerdo que mientras visitaba en unos grandes almacenes la sección de libros de autoayuda
(más tarde descubrí que la mayoría de ellos no pasan de lo que conocemos como “Super fe” o
mentalismo), sentí unas sensaciones en mi nuca y cuello, que imitaban con mucha fidelidad
algunas de las sensaciones corporales de mi bautismo en el Espíritu Santo. (Quiero advertir
aquí que debemos tomar este tipo de sensaciones físicas con muchísima precaución y análisis;
pues todo lo externo es fácilmente imitable por Satanás; y por ello debemos huir cuanto antes
de este tipo de experiencias de la pubertad espiritual corriendo hacia la madurez de la
espiritualidad que no se apoya en los sentidos, para no darle lugar al diablo; esto no quiere
decir que todas las experiencias físicas de la presencia de Dios provengan del maligno; pues
Dios también concede ciertos “mimos o carantoñas” a sus hijitos, pero luego las retira
gradualmente, lo mismo que hacemos nosotros con nuestros hijos, tratándoles de manera
acorde a su edad de crecimiento. En lo espiritual y como Juan dice: niños, jóvenes y padres; lo
2. que se corresponde también con las tres etapas antes citadas). En fin, que de alguna manera
mi atención fue dirigida hacia los libros del Método Silva y compré uno o dos de ellos.
Algunas personas dentro del negocio que estaba desarrollando habían acudido a las
conferencias de tal método diabólico y me habían animado varias veces a que yo me
inscribiera y siempre me había resistido.
Leí aquel libro y mientras lo leía sentía muy fuertemente esas sensaciones y una especie de
“fruición” en la lectura, que se parangonaba con la que había sentido y sentía al leer buenos
libros cristianos. El libro al fin acababa con el consabido “somos dioses y podemos obtener
cuanto deseemos”…
Obviamente después de abierta esta puerta decidí asistir a las conferencias. Entonces se
hacían el la Gran Vía de Bilbao en un alquilado salón de actos de la empresa Baccok Wilcox y
creo que se hacían un fin de semana, todo el sábado y el domingo; después de lo cual uno
podía acudir a las próximas siempre que quisiera, sin tener que volver a pagar. Recuerdo que
tuve que forzar a la que en ese entonces era mi esposa inconversa, pues Dios puso en ella una
dura resistencia, pero ni aun así cedí.
Las conferencias sobre todo trataban de meditación en base a cuentas regresivas para ir
descendiendo a diferentes niveles de consciencia: alfa, beta, etc. También se usaban unos
sonidos o cliqueteos rítmicos o de cierta frecuencia, para acompasar estos descensos. Se
hablaba de visualización orientada, etc. El sistema se disfrazaba como un método psicológico
de autoayuda para encontrar objetos perdidos, dejar de fumar, lectura rápida, sanaciones,
negocios, etc.; eso sí “siempre para hacer el bien desinteresadamente”, lo que no era sino una
linda expresión eufemística, para disfrazar el egoísmo y el orgullo de los que quieren apoyarse
en fuerzas extrañas, para obtener ventaja sobre los demás.
Llegaba un momento en que tenías que elegirte o nombrarte dos consejeros, que en realidad
son espíritus guías, aunque nunca te lo dirán. Llegué a darme cuenta, tras mi liberación, de
que debían ser dos, porque muchos elegían a Jesucristo, pero claro siempre había otro y así no
quedaba escapatoria. Podían ser cualquier ser vivo, muerto o imaginario. Por supuesto,
muchos elegían, como no, a María. Al fin y a la postre pretendían en ese finde que pudieras
tener una experiencia extracorporal (viaje astral o bilocación) y levitaciones. En resumen, de lo
que se trataba era de enseñarte a usar tu espíritu, igualitico que hacen los médiums,
satanistas, brujas, etc. y dejarte encadenado a esos espíritus guías diabólicos; a los quienes se
supone que tu haces trabajar para ti en un principio, pero de los que acabas siendo un esclavo
y quienes gradualmente y sin que te des cuenta destruyen tu vida en todos los órdenes: ira,
confusión mental, depresión severa, sufrimientos increíbles… Destruyeron mi hogar,
matrimonio, me echaron de la iglesia, etc…
A este “estado mental” de entrar en el espíritu, pero por las puertas falsas del diablo, se le
llamaba “entrar a nivel”. En principio unías los dedos índice y pulgar como los yoguis, luego
elevabas los ojos hacia sus órbitas para generar esas “ondas cerebrales” y cuando fueras un
experto en el asunto se supone que ya no necesitabas esos “truquis”, pues vivirías
habitualmente en dicho estado (es decir, completamente endemoniado).
3. Recuerdo que el aspecto del instructor era bastante negativo: barrigón, grosero de aspecto,
etc. Al pensar más tarde y ahora en algunos de sus colaboradores los recuerdo como fríos o
cadavéricos, con un “entusiasmo” frío o raro, tanto en sus aspectos como en sus testimonios.
Algunos testificaban haber sido sanados de cánceres, etc. pero ya sabemos ahora que lo
fueron al precio de ser atados demoníacamente.
Las sensaciones que experimentaba eran tan similares a las que había tenido en un principio
tras mi bautismo en el Espíritu Santo, que llegué a tener una cita, con el instructor, en un
restaurante de Getxo-Bizkaia, donde él y yo vivíamos. Le conté mis experiencias espirituales y
al fin él me invitó a que fuera con mis hijas a una reunión especial que se hacía en Madrid. Me
dijo que estaba interesado en mis contactos del negocio. También me dijo que los niños eran
buenos captando estas cosas y que si le llevaba gente a las reuniones no me cobraría nada por
mis hijas en unas conferencias de un nivel más avanzado que se realizaban en Madrid. ¡Gracias
a Dios que fue misericordioso y me abrió los ojos y me liberó a tiempo! Supongo que esas
reuniones especiales de Madrid serían algo así como reuniones de satanistas… Gracias que
Dios protegió a mis dos hijas nacidas de nuevo…
También recuerdo que dijeron algunos de los famosos que habían pasado por el “Control
Mental”: toda la familia real, Moncho Borrajo (ahora os explicaréis porque su retentiva
“memoria” y su vocabulario soez en sus espectáculos), Juan José Beneitez, el autor de los best
sellers “Caballo de Troya” (inspirados por sus “consejeros” mientras “estaba a nivel”); creo
recordar que Mecano o al menos Nacho Cano también; etc. Si amigos, todas esas
composiciones literarias, musicales, etc. de esta gente tipo Mike Oldfield (Tubulars Bells), etc.
han sido recibidas “estando a nivel” o en trance.
Bueno, mi vida acabó siendo un infierno. Mi matrimonio y hogar fueron desechos. Sufrí hasta
el paroxismo y mi depresión duró como ocho años. En la iglesia a la que acudía no creían que
un nacido de nuevo pudiera ser atado por el diablo. Pero yo os digo que siéndolo y aun
habiendo recibido la experiencia pentecostal esto es posible. Cuando el Espíritu Santo vino a
mi vida, junto con el bautismo de Espíritu Santo y Fuego, trajo una hambre y una sed
espirituales tan grandes que mi único deseo era orar, leer (como 4 libros semanales), ayunos
(uno de 28 días a solo agua, otros de una o dos semanas y otro de 3 días sin comer ni beber),
ayunos semanales regulares de dos y tres días durante años, ir a todas las reuniones,
seminarios, etc. Pero coexistiendo con esto un sufrimiento atroz debido a las ataduras
diabólicas; de las que únicamente pude salir porque Dios soberanamente me hizo llegar el
libro de Rebecca Brown “El Vino a Liberar a los Cautivos”; recuerdo que la primera vez me lo
dejaron en francés y lo leí pensando que aun no estaba en español.
Cuando alcancé la libertad siguiendo la guía de esta hermana puede darme cuenta de tantas
cosas y además el Espíritu me fue revelando todo sobre el Método Silva y me lo confirmó a
través de un libro de un autor argentino, del que no recuerdo el nombre ni el título del libro;
pero resultó ser una total confirmación de lo que ya Dios me había mostrado y que te he ido
relatando sobre la marcha.
Más adelante descubrí con tristeza que el diablo se había metido hasta la misma “cocina” de la
iglesia católica. Aquí en Bilbao, en Getxo, en el convento de las Madres Reparadoras se hacían
4. también reuniones del M. Silva, y en algunas parroquias. ¡Imagínate! Madres Destrozadoras las
llamo yo. Yo pude guiar a la libertad a uno de los que pasaron por las manos de estas
destrozadoras.
También he comprobado que las librerías católicas como San Pablo tienen todo mezclado:
libros católicos, evangélicos, y de ocultismo (Nueva Era, Control Mental, Sufismo, etc.)
¡Menudo cacao que tienen montao!
Pude saber en Puerto Rico, cenando en la casa de una profesora universitaria amiga, de una
portorriqueña afincada en Madrid y con contactos de cierto nivel entre los católicos que la
mayoría de los abades y abadesas están bajo el control de brujas, enseñando zen-budismo,
etc.
Termino diciéndote que discerní una operatoria o estrategia de destrucción una vez que
quedas atado por participar en este método de descontrol mental; esto ocurrió en mi caso y
en del amigo-hermano que el Señor me guio a ayudar en su liberación y supongo que el
maligno lo hará con todos de manera similar: Satanás, siempre tratando de invertir y pervertir
las cosas de Dios, destruyó la fuente de ingreso del varón, para que, humillado, la esposa
asumiera la preeminencia, la cabeza del hogar. Yo que siempre “me ataba en cinturón del
pantalón alrededor del cuello”, llegué a hacerlo “alrededor de los tobillos”, hasta que después
de liberado Dios un día me habló para decirme que ni tan alto ni tan bajo, que Él lo quería “en
la cintura”. En el caso de mi amigo además de esto disfrazó sus operaciones en el hogar de él,
llevándolos a la religión, en este caso católica, donde él era uno de los que repartían la
comunión… ¿Entiendes la estrategia? Mientras ellos acudían a sesiones de lectura de aura,
tenían su tabla ouija, su péndulo, etc. se disfrazaban de “buenos”. Además recuerdo que su
esposa tenía un ego tan gigantesco de esos que si te los cruzas tienes que bajarte de la acera
porque ambos no entran a un tiempo. El asunto de empezar ir a misa vino por sugestión se sus
"consejeros", pues antes de acudir al método Silva no iban, eso me dijo mi amigo. Y eso es una
demostración más de que el la católica Satanás se siente en su casa.
En fin querido Víctor, espero que esto sirva de testimonio para que muchos sepan de este
sistema diabólico que engancha a miles de personas conferencia tras conferencia; es decir, en
serie, en base al engaño Satánico, siempre disfrazado y en este caso de método psicológico de
autoayuda.
Te ruego que si te parece bien mostrar este testimonio, que me has solicitado, lo hagas al
completo. Por supuesto si algo no está de acuerdo con tus postulados espirituales lo adviertas
cuando lo leas, pero no dejes de leerlo al completo.
Un abrazo,
TXEMA ARMESTO CALDEIRO