El documento habla sobre la vocación como el llamado de Dios a cada persona para que asuma su identidad y se realice de acuerdo a su propósito. Explica que la vocación implica que Dios toma la iniciativa al llamarnos, y que la persona debe responder entregándose completamente con mente, corazón y voluntad. Además, la vocación conlleva una misión concreta de anunciar la Buena Nueva y liberar a la comunidad.