El documento divide las competencias laborales generales que promoverán las instituciones educativas en seis categorías: intelectuales, personales, interpersonales, organizacionales, tecnológicas y empresariales. Cada categoría incluye ejemplos de competencias relevantes como toma de decisiones, orientación ética, trabajo en equipo, gestión de recursos, uso de herramientas tecnológicas y habilidades para crear unidades de negocio. La clasificación se hace con fines pedagógicos para que los docentes puedan desarrollar estas