El acceso de las personas con discapacidad visual a la información y a la cultura en igualdad de oportunidades (1)
1. CONVERSATORIO “LIBROS INFOLECTOR”.
Miércoles 24 de Julio 2013
FIL-JesúsMaría Lima —8 minutos.
ABSTRACT.
ACCEDER A LA INFORMACIÓN Y A LA CULTURA EN IGUALDAD DE
OPORTUNIDADES:
MUCHOS RETOS Y UNA UTOPÍA.
Estrategias que han funcionado en mi historia personal.
Implementar el „acceso a la información y a la cultura‟ en „igualdad de
oportunidades‟ impone a la sociedad muchos retos y en distintos frentes.
Implica el reconocimiento de la situación de inequidad y de las formas
más frecuentes de exclusión. Propiciar que el usuario entrene y agudice
sus habilidades, que haga un adecuado manejo de las herramientas a fin
que trascienda de receptor y decodificador a emisor y transformador de
la información está asociado a cambios significativos en la educación
formal e informal. Las estrategias de acceso a la información sólo
pueden evaluarse como aceptablemente funcionales, únicas o no
funcionales en relación con objetivos, materias y la percepción del
usuario. En cuanto al tratamiento de la información y su característica de
accesible la valoración de la contribución de la persona con discapacidad
visual y el reconocimiento de su experticia en los asuntos relativos a los
cambios que le interesan es decisiva para desactivar la inequidad.
2. ACCEDER A LA INFORMACIÓN Y A LA CULTURA EN IGUALDAD DE OPORTUNIDADES:
MUCHOS RETOS Y UNA UTOPÍA.
1. La „igualdad de oportunidades‟ es un concepto que no podría decirse que es
nuevo pero que ha sido largamente desatendido, y al respecto de su
presente incorporación al diseño e implementación de políticas públicas de
desarrollo equitativo / inclusivo global y local puede decirse que se ha
alcanzado un progreso evidente observable en los imaginativos diseños de
intervenciones relacionadas con situaciones muy concretas de inequidad
que han sido ejecutadas tanto por instituciones públicas como privadas.
2. Sin embargo, este progreso no es ni será automático, en la mayoría de
casos relativamente exitosos el proceso ha comenzado por reconocer al
sujeto de derecho, a quien se le proporciona herramientas para participar y
de ser el caso, perfilar su liderazgo para gestionar los cambios deseados,
visibilizando la situación de inequidad que estuviera impactando
negativamente en la calidad de vida de un colectivo determinado, así como
las formas más frecuentes en que esta situación afecta el ejercicio de sus
derechos.
3. A través de la historia el „acceso a la información y a la cultura‟ ha sido un
privilegio que consigue democratizarse y se consagra posteriormente entre
los derechos económicos, sociales y culturales establecidos en la
Declaración Universal de los Derechos Humanos.
4. No obstante, este derecho ha sido dramáticamente impactado tanto por la
tecnología la cual ha generado grandes brechas entre los que acceden
oportunamente, los que acceden con restricciones y los que no acceden a
la información; como por la globalización que incide permanentemente en
las estrategias de acceso, los usos de la información disponible y la
relevancia de los contenidos.
5. Este es el contexto en que ha tenido y aún tiene que desenvolverse con
autonomía la persona con discapacidad visual, nuestro (sujeto de derecho),
al acceso a la información y la cultura, al que podríamos ubicar teniendo en
cuenta la alta incidencia de los factores brecha tecnológica y globalización,
mayoritariamente entre el grupo poblacional que no accede a la
información, con un estrecho sesgo excepcional de aquellos que sí
accedemos a ella con severas restricciones.
6. Cosas muy cotidianas como escribir una dedicatoria, una nota, un correo
electrónico implica conocer la ortografía y las acepciones de una palabra o
3. los sentidos propio y figurado de frases que se ponen de moda para usarlas
con aceptable corrección. Identificarse con una tendencia de vestir o de
uso del tiempo libre (los hobbies) elegir qué leer, establecer preferencias
para artistas, autores, deportes y el qué hacer, admitir o rechazar juicios,
adoptar posiciones, emitir opiniones, construir argumentos, ser un
ciudadano promedio con relativa autonomía plantea muchos retos que de
acuerdo al enfoque social de la discapacidad desarrollado en la Convención
ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, deben ser
asumidos por la sociedad.
7. Mi historia personal es una permanente combinación y re combinación de
estrategias, materias y objetivos, que me han permitido dividir las
estrategias de acceso a la información y a la cultura en tres grupos, las que
relativamente funcionan, las que deben usarse porque no hay otra
alternativa y las que no funcionan.
8. La lectoescritura Braille para leer y aprender otros idiomas, es un claro
ejemplo de estrategia que relativamente funciona en relación a una materia
y a un objetivo, la lectura informatizada o digitalizada generalmente es la
única posible de usar para una gran cantidad de contenidos y la lectura
auditiva o en audio para materias como matemáticas, ciencia, tecnología y
ambiente es una estrategia que en mi experiencia no funciona. Sin
embargo la lectura auditiva para lectura de ocio o recreativa me atrevo a
decir que es no sólo ad hoc sino la mejor.
9. Por otro lado, el reto de lograr que nuestro (sujeto de derecho), trascienda
desde el rol pasivo de receptor y decodificador de información a emisor y
transformador es un reto elementalmente para padres y educadores. la
experiencia en el acceso a la información y a la cultura que mis padres
probablemente sin intención propiciaron para mí se ha caracterizado por
ser dinámica y pro activa lo cual la hizo de algún modo excepcional. Los
esfuerzos que ellos hicieron por habilitarme en el uso de la escritura
convencional, tanto al pulso / de puño y letra como usando la máquina de
escribir y luego la computadora han generado un valor agregado a la hora
de acceder a la información y evaluar desde la discapacidad visual la
utilidad de las herramientas usuales para la búsqueda y la organización de
contenidos.
10.Finalmente, puede que algunos webmasters, líderes de organizaciones y
funcionarios de la educación consideren que han hecho suficiente con
relación a hacer accesible la información y que es más bien el colectivo de
personas con discapacidad visual el que no está respondiendo conforme a
4. la expectativa. Como anécdota puedo comentar que he sido invitada en
muchas ocasiones a probar la accesibilidad de algún sitio web y cuando
tuve la ocurrencia de sugerir algunas modificaciones a los contenidos o que
se añada información a aquello que por estar dependiente de una imagen
no me resultó claro, he sido irrespetuosamente parametrada, con la frase
clásica de la exclusión, “sólo nos interesa saber si el software lector de
pantalla le lee o no le lee la información”.
11.El reto más importante, “involucrar al usuario final en la elaboración del
producto información”, ha sido largamente desestimado incluso por las
instituciones que por naturaleza debieran promoverlo, esta evidencia me
permite concluir en que mientras no se valore la contribución y la experticia
de las personas con discapacidad en los asuntos relativos a los cambios
que le interesan, “acceder a la información y a la cultura en igualdad de
oportunidades” seguirá siendo una utopía.