El trato que predomina en nuestra cultura es el maltrato lo que nos lleva a pensar que el buen trato es una utopía en contextos como el nuestro, es decir, violentos. Sin embargo todo cambio y al que por supuesto las personas se resisten inicialmente por las posibles exigencias que implica y porque generalmente alguien pierde lo que ganaba cuando quienes perdían hasta ese momento eran otros se ha mostrado como algo difícil de lograr.
1. ¿ES POSIBLE CONSTRUIR UNA CULTURA DEL BUEN
TRATO?
Actualmente nuestras costumbres hacen pensar en un “no”, siendo a veces un
rotundo no, puesto que se trata de cambiar hábitos, comportamientos,
representaciones o estilos de vida.
Ser bien tratados es un derecho que tenemos todos por el simple hecho de existir.
Más el trato que predomina en nuestra cultura es el maltrato lo que nos lleva a
pensar que el buen trato es una utopía en contextos como el nuestro, es decir,
violentos. Sin embargo todo cambio y al que por supuesto las personas se resisten
inicialmente por las posibles exigencias que implica y porque generalmente
alguien pierde lo que ganaba cuando quienes perdían hasta ese momento eran
otros se ha mostrado como algo difícil de lograr.
Un ejemplo ha sido la igualdad entre blancos y negros, el acceso de la mujer a la
universidad, o la opción de elegir sobre nuestro cuerpo. Otro gran ejemplo es el
que se ve a diario cuando un hombre se presenta a un puesto de trabajo, este
contiene más oportunidades debido a las ideologías de las grandes empresas que
creen que los hombres son mucho más eficientes y capaces que las mujeres, y si
a esto agregamos el antiguo pensamiento de que las mujeres son para la cocina y
lo hombres para el trabajo, entonces ¿se práctica el buen trato en la igualdad
entre hombres y mujeres?
El maltrato o la violencia basada en género producirán daños o sufrimientos
físicos, sexuales o mentales en la mujer, que incluyen amenazas, la coerción o la
privación arbitraria de la libertad, tanto en la vida pública como privada.
Frente a esto el Perú suscribió la Convención contra todo tipo de Discriminación
hacia la Mujer. De este modo, el Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades
entre hombres y mujeres (2006- 2010) cuenta entre sus enfoques el de la equidad
de género, que parte de la constatación de desigualdades entre mujeres y
hombres. Plantea la necesidad de modificar las relaciones de poder que afectan a
las mujeres, erradicar toda forma de violencia basada en género, asegurar su
Título
INTRODUCCIÓNDESARROLLO
Contextode
ladiscusiónLosproblemasTesis
Explicaciónyexposicióndelos
argumentosquesustentanlaidea
central
2. acceso a recursos, servicios de salud y educación, generando acciones positivas
para fortalecer su participación en la política y en la toma de decisiones.
La fuerza de lo cultural hace difícil establecer relaciones desde el buen trato, ya
que significa construir personas capaces de amar, perdonar, tolerar, respetar al
otro y a la otra, aceptándolos como son, poniéndose en su lugar y ejerciendo
acciones de solidaridad. Por consiguiente, la construcción de una cultura del buen
trato requiere de un proceso de interrelación de los diferentes actores sociales, en
cada uno de los espacios que constituyen la realidad. También es necesario
comprender que este es un proceso arduo de ruptura de los diferentes
paradigmas, de resignificación de la cotidianidad y con ello es establecimiento de
nuevas posturas hacia el individuo y su entorno.
Escallón afirma: “durante muchos años, el hombre se ha dedicado a la acción y
muy poco a la reflexión. En el momento en que volvemos sobre nosotros mismos
y descubrimos nuestra conciencia, la capacidad para reflexionar acerca de
nosotros mismos, podemos descubrir un hombre y una mujer con una estructura
génica de amor y con un aprendizaje de dominación, de tiranía, de negación del
diferente”.
La reflexión a esto es el fundamento de la acción, resulta un tanto difícil entrar y
hacer visibles el producto del comportamiento cotidiano. Para ello, la voluntad es
un buen inicio, pero hay que trascenderla y dar paso a la ejecución de estrategias
específicas que posibiliten el reconocimiento de sí mismo, del otro y de la
dinámica de los grupos, para establecer las bases que den lugar al buen trato.
Finalmente si queremos una realidad del buen trato, es necesario que al interior de
la sociedad se gesten procesos de cambio, en primera instancia, de lo que
significa la persona, así y solo así modificaremos patrones de crianza y formas de
interacción. Comenzaremos con los más pequeños creando programas de
convivencia escolar en instituciones públicas y privadas; luego promoveremos
acciones de promoción de buen trato y una cultura de paz y se finalizara
coordinando con el ministerio de educación la implementación de acciones de
promoción de buen trato de manera que la información llegue a toda la población.
DESARROLLO
Explicaciónyexposicióndelosargumentos
quesustentanlaideacentral
CONCLUSIÓN
Comentariofinal