La vacuna, la medicina y el tratamiento espiritual contra el coronavirus (COVID-19) o contra cualquier otra epidemia, pandemia o enfermedad. Sólo falta que tengas fe y te lo tomes
Luisa de Marillac y cuidado de las personas ancianas
La vacuna espiritual contra el coronavirus y cualquier otra enfermedad
1. La Vacuna Espiritual contra el Coronavirus y cualquier otra enfermedad
Hay momentos en que muchas de las oraciones y prácticas religiosas o espirituales pierden su
poder. Especialmente en tiempos degenerados donde aumenta la contaminación del entorno,
del agua, de la tierra, del viento, incluso del fuego, así como la contaminación de los seres (en
sus ideas, en sus emociones o de sus gobiernos) y la contaminación o degradación de los
alimentos o de sus cuerpos.
En esos momentos en que muchas oraciones pierden su poder, hay algunas que no lo pierden,
como es Tong-len, la práctica de tomar y dar, a través de la respiración.
¿Cuál es el secreto? Que la fuerza más poderosa de todo este universo es la compasión. Pero
se vuelve más poderosa cuando se une a la sabiduría.
Para pasar de este “pantano” en el que estamos sumergidos como humanidad en este
momento sin mancharnos, requerimos, como un ave dos alas: un ala es la compasión y otra
ala es la sabiduría.
No necesitas cambiar de religión o adoptar oraciones o prácticas de que te suenan extrañas.
Busca dentro de tus mismas creencias, e incluso si no tienes creencias, aquello que te permita
incrementar tu compasión hacia ti y hacia todos los seres (humanos, animales, insectos) y
aumentar tu sabiduría espiritual (no tu conocimiento mundano).
Si no sabes cómo hacerlo, aquí te comparto algunas enseñanzas budistas que te explicarán
cómo hacerlo.
Si te cuesta mucho hacer el tonglen con los demás, empieza haciendo tonglen contigo mismo.
Aquí no voy a explicar esas enseñanzas, pero puedes verlas en esta presentación: https://
www.slideshare.net/DharmavsKarma/tong-len-con-uno-105169637
Velo todo como un sueño, ve todas las cosas, eventos y fenómenos que están ocurriendo
como manifestaciones de nuestra mente confusa. Observa el mundo de este modo. Toda
situación es sólo un recuerdo que está pasando ahora por nuestra mente. Los pensamientos
son como pompas de jabón o un espejismo o como un arco iris. Todo son sólo etiquetas que
nosotros ponemos, no tienen más poder o realidad que eso. Todo lo que vivimos son
meramente experiencias que están ocurriendo en nuestra mente. Todo el mundo e incluso
todos los seres son solo una percepción, una experiencia, una apariencia. Todo lo que
conocemos del mundo se transmite a través de percepciones, ya sea a través de nuestros
cinco sentidos o a través de nuestro pensamiento o emociones. No hay ningún mundo objetivo
y sustancial e independiente fuera de nuestro punto de vista.
Medita en ello. Tu eres el que le das poder, tu eres quien le da continuidad, tu eres quien le da
permanencia, pero en realidad todo es como una bola de humo, un espejismo.
Quizá te ayude meditar en estas frases.
“Creo lo que creo”
“Lo que decreto es”
“Si lo creo, lo creo”
“Creer es crear”
“Tanto si pienso que puedo, como si pienso que no puedo, estoy en lo cierto”.
“Tanto si crees que puedes, como si crees que no puedes, estás en lo cierto”
No es que nada exista, porque aparece, porque surge. Pero nada tiene una existencia tan
sólida, tan real -como algunos piensan de ese virus- porque todo es producto de causas,
condiciones, circunstancias y está compuesto de partes. Nada es simple, de una sola pieza, ni
2. tiene existencia en sí mismo, por si mismo, de forma inherente, sustancial. Todo es vacuo,
vacío. Trata de encontrar el justo medio entre la existencia y la no-existencia. No te vayas a la
nada, al nihilismo, a negarlo todo, porque todo surge producto de causas y condiciones,
debido a la ley de la causalidad. Pero nada es tan sólido, tan permanente, tan independiente,
no compuesto, no producido, tan existente, porque todo aparece ante nuestros sentidos, pero
de la misma forma se esfuma ya sea en forma burda, visible o en formas más sutiles o casi
imperceptibles. El mundo nos acaba de dar un ejemplo de ello al esfumarse de pronto nuestra
“vieja normalidad”.... así de un plumazo, de un día para otro...
Así que no le des tanto poder a los virus, a los gobiernos, a todo eso que tu crees que existe
allá afuera de una forma objetiva, concreta, sólida. Velo todo como un espejismo, como una
pompa de jabón, como un arcoiris que así como surge, así desaparece.
¿Te cuesta trabajo? Si, lo se, no es fácil.
Quizá te sirva verlo como lo veía la primera escuela filosófica de la India Antigua, los
naiyayikas, para quienes todo era un sueño de Ishvara. Algunos dicen que somos como el
sueño de un extraterrestre que en el momento en que despierte vamos a desaparecer, así que
ojalá que siga dormido y siga soñando en nosotros. Aunque muchas veces ese Ishvara es tu
propia mente, así que no tienes que inventar extraterrestres, sino búscalo dentro de ti mismo,
porque tu eres quien inventa ese sueño, quien le da continuidad y que luego se lo cree y lo
más trágico que luego sufre por todo lo que pasa en la fantasía que tu mismo creaste.
Patético, pero la gran parte del sufrimiento que tenemos lo creamos nosotros mismos con
nuestra propia mente. Así que es hora de despertar!
Si crees que todo es sólido, objetivo, real, permanente, pues “creo lo que creo”, “lo que
decreto es”, tu así lo decretaste y entonces para ti así es, pero no significa que así sea. ¿Me
entiendes? ¿me explico? Todo está en tu mente, tu mente es la que crea todo, la que así lo
decreta o lo determina. Pero por más que decretes algo que va en contra de la verdad y de la
realidad no será.
Te lo digo más fácil:
1. Todo fenómeno es compuesto de partes, de causas, condiciones y circunstancias. Es decir
son puros fenómenos producidos.
2. Todo fenómeno es impermanente, es decir que no permanece, surge, mora y cesa. Nace,
vive y muere. Así en una danza sin fin (hasta que despiertes).
3. Todo es insustancial, nada tiene existencia inherente, por si mismo, desde su propio lado.
Así que si todo es compuesto, impermanente o insustancial, entonces eso significa que todo
es vacuo, vacío. No significa que no exista, porque aparece, surge, se manifiesta ante nuestros
sentidos. Pero tampoco significa que tenga existencia sólida, inherente, por si mismo. Así que
no caigas en ninguno de esos dos extremos del nihilismo que niega todo, que cree en la nada,
pero tampoco en el extremo del existencialismo que cree que todo es existente, sólido, con
existencia inherente, desde su propio lado. Acuérdate, la clave es el Camino Medio entre
ambos extremos. Ni existe ni no existe. Eres y no eres. Está y no está. Es y no es. Se requiere
un nivel de comprensión más elevado que la habitual.
Además, todo fenómeno contaminado es sufrimiento. ¿Contaminado de qué o por qué?.
Contaminado por nuestra ignorancia, nuestros apegos o aversiones, es decir por el Triple
Veneno. ¿Así que por qué aferrarte a cosas que sólo te producen dolor y sufrimiento?
Suéltalas, libérate, despierta tu sabiduría inherente, suelta tus apegos y suelta tu ira, tu enojo,
tu miedo... ¿Puedes?
Todo lo que existe es un fenómeno compuesto. Es decir un fenómeno producido. ¿Compuesto
de qué? ¿Producido por qué?
Compuesto de partes. Por ejemplo un cuerpo humano está compuesto de células, de huesos,
de músculos, de sangre, de piel, de cabello, etc. El cuerpo está compuesto de 32 partes.
¿Dónde está ahí la solidez, la existencia inherente?
3. Una meditación protectiva es meditar en las 32 partes del cuerpo. Cierra los ojos, respira
hondo y medita en las partes que componen tu cuerpo:
pelo en la cabeza, vello en el cuerpo, uñas, dientes, piel, carne, tendones, huesos, tuétano,
riñones, corazón, hígado, pleura, bazo, pulmones, intestinos, mesenterio, estómago, heces,
bilis, flemas, pus, sangre, sudor, grasa sólida, lágrimas, grasas líquidas, saliva, mocos, fluido
sinovial, orina, sesos en el cráneo.
¿Dónde está el “yo” en todo eso, dónde lo ves, en una parte de esas o en el conjunto de todas
esas o en algo fuera de esas partes? Medita profundamente en ello, pero no inventes fantasías
más allá, porque acuérdate, lo que crees, lo creas, pero no significa que se crea, porque
muchas veces quedas atrapado en la trampa de tu propia ilusión... Así que muy abusado.
¿En esas 32 partes de tu cuerpo dónde ves ahí algo sólido, con existencia inherente, por si
mismo, libre de causas y condiciones, permanente, independiente?
El ser humano sólo es un conjunto de cinco cosas o de cinco montones o de cinco skhandas
como decían en sánscrito en la antigüedad: cuerpo, sensaciones, percepciones, formaciones
kármicas y conciencia. Pero aún así hay algo que puede llegar a tu máxima realización
espiritual. ¿Lo ves? Eso es lo único importante, lo único trascendente.
Recuerda, no es que no exista, tan existe que surge y ves tu cuerpo y ves otros cuerpos, pero
ninguno tiene existencia inherente, sólida, por si mismo, sino que sólo nacen, moran un
momento y luego mueren. Lo estamos viendo todo el tiempo, pero no nos lo creemos, es
nuestra mente que quiere que las cosas sean como ella quiere, una fantasía, una ilusión y
luego sufre porque las cosas no son como ella quiere, porque se da cuenta que no tiene el
poder de sostener su ilusión, su fantasía. Sufre porque su engaño no se hizo realidad.
¡Oh,decepción!
¿Qué hacer?
Recuerda tus dos alas:
1. El ala de la sabiduría
2. El ala de la compasión
2. Voy a empezar ahora por el ala de la compasión.
- El sufrimiento es real, ahí está, la gente está enfermando, está muriendo, está perdiendo a
seres queridos. ¿Te da miedo morir? ¿Te da miedo enfermar? ¿Te da miedo perder seres
queridos? Entonces ten el valor de tomar todo ese sufrimiento como un humo negro y al
inhalar permite que ese humo negro entre en tí y que llegue hasta tu corazón, enfrente del cual
hay una piedra negra que simboliza tu egoísmo, tu soberbia, tu visión autocentrada, tus
engaños, tus ilusiones, tu ignorancia, tu confusión, tu miedo, tus apegos, tus aversiones, tu ira,
tu enojo, tu incertidumbre, tu escepticismo, tu negación de la verdad y de la realidad.... y
cuando ese humo negro de dolor, de sufrimiento, de confusión que envuelve a los seres llega
hasta esa piedra negra, cuando se tocan el humo con la piedra, estallan en luz y se disuelven
automáticamente sin dejar ningún rastro en la esfera de tu conciencia superior, en el Palacio
Invisible de tu Mente Inmortal así como un arcoiris desaparece tal como surgió o como un
espejismo desaparece en el desierto al acercarte a él sin dejar ningún rastro. Y al exhalar
manda todos estos rayos de luz blanca, dorada, azules de sanación, verdes de poder a todos
esos seres deseando que estén bien (con salud y sustento), que estén en paz (con calma
mental, sin miedo, sin temor, sin pánico) y que recuperen pronto la felicidad de sentirse vivos,
sanos, seguros, con todo lo que necesiten para su camino mundano-material y para su camino
espiritual.
4. Repite esto tres veces cada que sientas miedo o angustia por los que están sufriendo,
envejeciendo, enfermando, muriendo o perdiendo a seres queridos.
¿Te preocupa el sufrimiento de la gente? Entonces toma todo ese sufrimiento en forma de ese
humo negro, hasta que no quede nada de ese humo negro alrededor de ellos, hasta que no
quede nada de ese sufrimiento, tómalo todo.
1. Pero no te olvides de la otra ala, de la ala de la sabiduría que ve que todo es vacuo, vacío,
producto de la vacuidad, que todo es como un sueño, como una ilusión, si quieres como una
pesadilla irreal que se esfumará en el momento en que despiertes de ese sueño, de esa
pesadilla. Que todo es sólo una creación de tu mente, una percepción, una apariencia.
Siente más compasión por toda la gente que cree que todo es real, sólido, con existencia
inherente, porque su sufrimiento así lo toman, como real, como algo sólido, como algo que
existe por si mismo. Y acuérdate: si lo creen, lo crean. Para ellos su sufrimiento no es una
ilusión. Es algo muy sólido, muy real, que se aferran fuertemente a ello, que lo abrazan sin
quererlo soltar o dejar ir. Entonces requieren toda nuestra compasión, todo nuestro afecto,
todo nuestro cariño, todo nuestro apoyo, toda nuestra conmisericordia.
TE COMPARTO ESTA MEDITACION
Ahora siéntate o acuéstate en silencio y en soledad.
Cierra tus ojos. Haz tres respiraciones profundas, abdominales, en la primera de ellas sacando
todo el aire viciado de tu cuerpo.
Ahora ánclate en el elemento tierra, permanece en ese elemento por un momento. Ahora pon
toda tu atención sólo en la respiración igual por un momento. Luego pon toda tu atención sólo
en los sonidos.
Ahora suelta todo, pero no sueltes la atención, ni la alerta. Si es necesario aumenta el esfuerzo
o baja el esfuerzo, hasta que logres el control de tu mente. Trae tu mente al momento
presente, al aquí y al ahora. Suelta todos tus problemas y preocupaciones. Suelta todos tus
pensamientos y emociones. Suelta todo el pasado y el futuro. Ubícate en el momento
presente.
Ahora imagina todo el dolor y sufrimiento de los seres a nivel mundial por la enfermedad, por
la muerte y por las pérdidas, por su miedo, por su confusión, por tus preocupaciones, por su
incertidumbre. Velo como un humo negro que los envuelve y al inhalar permítete inhalar todo
ese humo negro que al llegar a la piedra negra del egoísmo, de la soberbia, de la ignorancia
que está frente a tu corazón, al tocarse el humo con la piedra ambas estallan en luz en el
Palacio Invisible de tu Conciencia Superior y desaparecen como un arcoiris sin dejar ningún
rastro o huella. Y al exhalar mándales tu amor, tu compasión junto con rayos de luz sanadores
a todos los seres del mundo, a toda la humanidad para que estén bien, en paz y felices.
Haz esto por tres veces.
Luego vuélvete a sumergir en la soledad y en el silencio pero sin perder tu atención ni tu
estado de alerta y vigilando todo tiempo el esfuerzo... Mora ahí el tiempo que quieras/puedas.
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¿Puedes juntar la compasión con la sabiduría? Si puedes desplegar esas dos alas entonces
podrás volar sobre toda esta miseria que está atosigando en este momento a la humanidad
por la epidemia, por el confinamiento, por las pérdidas económicas, por la pérdida de tu
empleo o de tu ingreso o por la ausencia de abrazos, de apapachos, de recibir el cariño de tus
seres queridos, por la soledad o por los problemas o conflictos de convivencia.
¿Querías una vacuna? ¿Querías una medicina? ¿Querías un tratamiento?
Aquí lo tienes. Se llama Lojong o los Siete Puntos del Entrenamiento de la Mente *
5. * Los Siete Puntos del Entrenamiento de la Mente fueron escrito por Ja Chekawa Yese Dorje
(1101-1175).
Si quieres entender más ese entrenamiento puedes consultar el libro de “El Camino del
Despertar” de Shamar Rinpoche.
Pero si esto te parece confuso o demasiado elevado o inentendible entonces busca dentro de
tus propias creencias o religión cómo desplegar tus dos alas de compasión y de sabiduría.
Estas son enseñanzas budistas, pero no tienes que hacerte budista para poder utilizarlas. No
tienes que cambiar de religión porque eso te causará más confusión.
Pregunta dentro de tu propia religión cómo practicar Tong-len y cómo aprender a verlo todo
como un sueño, como una ilusión. Por ejemplo, aquí utilicé las enseñanzas de los naiyayikas
que lo veían todo como un sueño de Ishvara, ellos no eran budistas. Pero si quieres una
expresión más moderna, ve la película de Matrix, donde todo lo veían como una simulación
total creada con maliciosas intenciones por parte de la ciberinteligencia.
¿Te gusta creer en la Teoría de la Conspiración? Nada de eso existe, pero si tu quieres creer en
ello, entonces para tí si existe, para ti si es real y encontrarás miles de evidencias o razones
para creer en ello, para quedarte atrapado en esa ilusión y te parecerá increíble que nadie más
que tu vea eso, crea en eso. Tu quedaste presa de tu propio engaño, de tu propia ilusión. Estás
atrapado en esa caja. ¿Podrás salir de esa caja, podrás escapar de esa ilusión?. Si eres capaz
de creer eso, entonces ¿por qué no crees que todo es una ilusión, una fantasía, un sueño? Por
qué sólo creer que una parte del mundo es una fantasía y la otra parte no. Atrévete y da el
salto total de ver que todo es una ilusión, un sueño. Pero no solidifiques tu Teoría de la
Conspiración, tu sueño, pensando que ahora eso si es lo real... jajaja... porque entonces te
convertiste en un producto de ese sueño o fantasía y entonces te vuelves lamentable, hasta
objeto de burla o risa... entonces por eso es que debo sentir más compasión y comiseración
por ti. ¿You understand me? ¿Me entiendes? ¿Me explico?
Pero nada de esto te va a servir si no meditas profundamente en ello, analízalo las veces que
quieras, confróntalo, rétalo, trata de negarlo, trata de destruir su lógica, si puedes... hasta que
quedes totalmente convencido. Esto no es un dogma, esto no es algo que debes de creer,
sino es algo que debes creer por ti mismo una vez que lo hayas verificado y comprobado por ti
mismo: todo es vacuo, todo es una ilusión, todo es un sueño, pero al mismo tiempo requiero
generar compasión por mí que quedo tantas veces prisionero de este engaño, de esta ilusión y
sentir compasión por todo el sufrimiento de tantos seres. Yo creo mi propia Teoría de la
Conspiración y luego quedo atrapado en los hilos de la telaraña que yo como araña tejí con mi
propia mente. ¡Patético, pero es lo que hacemos todo el tiempo!
Pero no es suficiente que te quedes esto como un conocimiento intelectual, racional. Una vez
que creas que así es, entonces introyéctalo y deja que permee en cada una de las células de
tu cuerpo y que baje a tu mente-corazón y entonces medita en ello, quédate un momento en
silencio, en soledad y deja que “moje” todo tu cuerpo, toda tu mente, todo tu espíritu, toda tu
conciencia, todos tus pensamientos, todas tus emociones... Eso te sanará, eso te purificará,
eso te vacunará contra cualquier virus o contra cualquier amenaza que sientas o percibas del
exterior. No hay nada más poderoso, no hay medicina más potente, no hay curación más
eficaz.
Has tres respiraciones tong-len de tomar y dar. Cuando inhales toma todo el sufrimiento de los
seres, cuando exhales mándales toda tu felicidad.
Te voy a compartir cómo practicaba Tonglen uno de mis maestros, Shamar Rimpoche, al que
sólo vi una vez en mi vida:
6. “Frente a una situación terrible, continua entrenándote en el lodjong (en verlo todo como un
sueño, pero desarrollando tu compasión por todos los seres). En lugar de sentirte perdido,
enojado, temeroso, utiliza esta dura prueba para practicar tonglen: dar y tomar. A medida que
sufras genera la bodhicitta (que es desear alcanzar tu máximo desarrollo espiritual para
beneficio de todos los seres. Para los budistas significa alcanzar el nivel de un Buda, pero tu
velo desde la perspectiva de tus creencias o no creencias o desde la perspectiva de tu
religión, por ejemplo “fundirte en Dios o en Cristo” o lo que creas, en lo que tengas fe o
devoción o si eres escéptico no creyente entonces ve que alcanzas la mejor versión de ti
mismo, el mejor ser que puedes ser). Haz tuya toda la infelicidad de los seres. Esto tendrá el
efecto de transformar tu dificultad en una preciosa oportunidad de practicar el entrenamiento
mental (y eso es lo único que te vas a llevar cuando mueras, cuando transites de esta vida y te
vayas a otra dimensión, así que no hay nada más importante o valioso que puedas hacer).
“Muchos yogis, como Milarepa (el santo poeta del Tíbet, leer su biografía te reconfortará, así
como escuchar sus cantos), tenían la costumbre de desplazarse cantando canciones.
“Cuando se sentían felices cantaban canciones como:
«Oh, soy feliz. Muy bien, eso significa que puedo dar: ¡Pueda toda mi felicidad dirigirse a todos
los seres sensibles y que la disfruten!»
“Cuando se sentían tristes cantaban canciones como:
«Oh, estoy sufriendo. Muy bien, eso significa que puedo tomar. ¡Pueda yo absorber el
sufrimiento de todos los seres sensibles y aliviarles por completo”»
“Los yoguis empleaban los métodos del entrenamiento de la mente día y noche. Como
consecuencia, no experimentaban problema alguno. (Quieres aprender más cómo curar la
enfermedad no desde el punto de vista relativo, mundano-material, sino aprehender ¿cómo
curarla desde el punto de vista espiritual, trasmundano y más allá de lo material?, puedes ver
esta presentación y el video de las enseñanzas que ahí se menciona de Lama Tsondru, esas
son las enseñanzas más elevadas del yogi Gotsampa, quien jamás tomó una medicina o
acudió a un doctor, sino que se curaba espiritualmente: https://www.slideshare.net/
DharmavsKarma/la-enfermedad-desde-el-punto-de-vista-budista).
“A medida que tu práctica del entrenamiento de la mente madure, sentirás que tu libertad se
expande cada vez más. Los muros habituales del deseo y la aversión comenzarán a
derrumbarse. Pase lo que pase, bueno o malo, dejará de suponer diferencia alguna para ti.
Estarás abierto a todo porque podrás transformarlo en el camino del despertar”.
Wow! ahí tienes la medicina, el tratamiento, la vacuna, la cura. Ahora sólo falta que te la tomes
con disciplina, que desarrolles devoción en ella no como un dogma, sino porque lo has
investigado, analizado y lo has experimentado y probado por ti mismo.
¿Puedes hacerlo? Ahí está tu cura, ahí está su salvación.
Demos gracias a los médicos, enfermeras, personal de salud que con compasión y sabiduría
están arriesgando sus vidas para salvar las nuestras, así como por todos los que producen
nuestros alimentos, nos dan seguridad, nos dan su apoyo y cariño. Y nosotros demos lo mejor
de nosotros mismos a los demás, hagamos lo que nos toca hacer con honestidad, con
responsabilidad, cuidando siempre de no dañar o causar dolor o sufrimiento a ningún ser.
Deseo que estés bien, en paz y feliz en compañía de todos tus seres queridos.
Te mando un abrazo espiritual y muchas bendiciones.