1. En un lugar al sur de la bella Colombia existe un municipio llamado Acevedo y
en este, una de las tantas Instituciones Educativas rurales, llamada “Marticas”
de la cual hago parte y ejerzo por vocación y como profesional en educación
básica con énfasis en humanidades y lengua castellana el trabajo de docente
en la sede Santo Domingo.
La práctica educativa propia, dirigida hacia la enseñanza de algunos
componentes de la lengua materna y motivación hacia la lectura en el plantel
educativo y fuera de este, me permite día tras día, una actividad dinámica,
donde algunas secuelas del modelo de escuela tradicional y post primaria,
junto con la lúdica, se conjugan con el propósito de hacerlo un ejercicio
reflexivo, teniendo en cuenta los siguientes aspectos en el proceso de enseñar:
el pensamiento didáctico de quien se dirige a ustedes, el profesor, y la
planificación de la enseñanza, la interacción educativa dentro del aula y la
reflexión sobre los resultados alcanzados, entendiendo estos como los
acontecimientos transversales ocurridos en la interacción entre
maestro y estudiantes.
Habiendo puesto en evidencia y con base en las anteriores consideraciones
puedo decir que no ha sido y no es un trabajo fácil pero al mismo tiempo no se
hace imposible; muchas veces me he visto entre la espada (los contenidos que
ofrece los libros que envía el ministerio para post primaria) y la pared (las
directivas que en algún momento se mostraron reacios a una nueva propuesta
de plan de área que se saliera de lo establecido en los libros de post primaria),
pretendiendo, en un trabajo conjunto con un compañero de la misma área, el
objetivo de tener un currículo alineado con con los estándares y los derechos
básicos de educación y así tener una enseñanza contextualizada de temas
más acordes con lo propuesto en las pruebas nacionales (pruebas saber), que
permita además evidenciar conocimientos no solo de la parte académica sino
que también se preparen para la vida misma.
Puedo decir que la enseñanza de los temas se convierte muchas veces en una
carrera contra reloj, ya que así lo requieren las normas o directrices con las que
somos evaluados, no obstante, se hace pertinente volvernos estrategas de la
educación (enseñanza estructurada) y es aquí donde las diferentes
herramientas didácticas (oratoria, mapas conceptuales, videos, juegos,
computadores, etc.) han cumplido un papel fundamental para llevar a cabalidad
el buen ejercicio y que el estudiantado cuente con el tiempo suficiente para
aprender, en un ambiente propicio no solo en el aula de clase, también en los
diferentes espacios del plantel siempre bajo los parámetros de respeto mutuo
entre docentes - estudiantes, y entre ellos mismos. A través de videos, bailes
obras de teatro, exposiciones que los estudiantes ven y proponen se lleva a
cabo la praxis en asignaturas correspondientes con mi responsabilidad en la
institución.
En el contexto del diplomado esta narración, escrito, reflexión, me ha permitido
identificar, aunque no con total plenitud -aclaro- señalare la distinción de
ciertas (dos) tendencias pedagógicas permeadas en mi aula de clase, en mi
práctica docente esencialmente de carácter conceptual, ya que estos procesos,
considero, se influyen mutuamente y en algún momento del buen ejercicio de la
2. praxis convergen muchos, pero acudiendo a lo requerido me referiré a “la
técnica didáctica en la que la exposición de contenido se hace por medio de
videos que pueden ser consultados en línea de manera libre, mientras el
tiempo de aula se dedica a la discusión, resolución de problemas y actividades
prácticas bajo la supervisión y asesoría del profesor (Aprendizaje Invertido)”; y
“al modelo de aprendizaje que implica la vivencia de una experiencia en la que
el alumno puede sentir o hacer cosas que fortalecen sus aprendizajes.
(Aprendizaje Vivencial)”.
El modelo descrito no es una decoración rosa de mi práctica educativa, es lo
que es, y encuentro aspectos positivos y otros negativos que me impulsan
además, de ver necesario desarrollar más criterios, instrumentos y
procedimientos relacionados con la enseñanza, presentándome una
oportunidad de cambiar esos rezagos de las formas tradicionales de la
docencia, a través del trabajo reflexivo como profesor y el uso de las TIC, en mi
accionar docente en la educación superior en el área de lengua castellana
Acudiendo a palabras que no son mías me permito concluir con lo siguiente,
Coll y Solé (2002) señalan “que el análisis de la práctica educativa debe
comprender el análisis de la interactividad y de los mecanismos de influencia
educativa, por ejemplo cómo aprenden los alumnos gracias a la ayuda del
profesor”, para señalar la importancia del diplomado, ya que en estos tiempos
puedo afirmar que la tecnología da pasaos agigantados y no concibo la idea del
docente como un simple dictador de contenidos de libros de texto sino como un
innovador en el uso de estrategias y porque no decirlo en este momento, de las
TIC siempre en pro de la mejoría del que hacer pedagógico y en el impacto en
los aprendizajes de los estudiantes.