1. UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA EXPERIMENTAL LIBERTADOR
INSTITUTO DE MEJORAMIENTO PROFESIONAL DEL MAGISTERIO
EXTENSIÓN PARAGUANÁ
ESPECIALIDAD: EDUCACIÓN PREESCOLAR
CÁTEDRA: EXPRESIÓN PLÁSTICA EN PREESCOLAR
TUTOR: EVAN THAIS MARTINEZ
AUTORA:
SILVA SUGEIL
COHORTE 2009
LOS TAQUES, JUNIO DEL 2012
2. INTRODUCCION
El dibujo no es más que otra forma de lenguaje, una nueva manera de
comunicarnos con el exterior, tanto el niño como el adulto. Siempre que se dibuja
algo se deja una parte de sí en el papel, es por esto que desde que los niños comienzan
a realizar sus primeros garabatos; los adultos deben respetarlos y darles la
importancia que tiene para aquellos que lo dibujen.
A todos los niños les gusta dibujar. Desde que son muy pequeños ya son capaces
de coger el lápiz y hacer garabatos. Al principio serán movimientos incontrolados que
dejan su huella en el papel, después, cuando domine los movimientos de la mano, irá
poco a poco traspasando en la hoja en blanco lo que piensa, lo que ve o lo que
imagina.
La belleza en los trabajos de los niños aporta un conocimiento de la mente del niño que le da al
maestro una forma de conocer diferentes aspectos de su persona.
3. ETAPAS DEL DIBUJO EN LOS NIÑOS
El dibujo de los niños va transitando diferentes etapas que pueden, en alguna
medida, relacionarse con la edad, aunque hay que tener en cuenta que se trata de una
esquematización que tiene sus variaciones basadas en la evolución de cada niño.
El primer trazo es un paso muy importante en su desarrollo, pues es el
comienzo de la expresión que no solamente lo va a conducir al dibujo y a la pintura,
sino también a la palabra escrita.
La primera etapa que atraviesan, en su manipulación y trazados fortuitos, es la
etapa del garabato. Pueden observarse en esta etapatresmomentosdiferentes.
1. Garabato descontrolado:
Cuando cumplen un año y medio los niños ya pueden tomar un lápiz,
una pintura o un crayón y realizar sus primeros garabatos: unos trazos
desordenados, descontrolados, irregulares y con dirección variable. Estas
primeras marcas suelen salirse del papel y carecen de sentido. El garabato
funciona como simple descarga motora para el niño, que obtiene placer con el
movimiento.
4. 2. Garabato sinnombre:
Alrededor de los dos años y medio, los niños tratan de controlar y dirigir el
movimiento de la mano, comienzan a respetar los límites de la hoja y tratan de cerrar
las líneas. El garabato se hace circular y los trazos más controlados.
Garabato con nombre:
Aquí el niño descubre que hay una relación entre sus movimientos y los trazos
que realiza en el papel. Comienza a dar nombre a sus dibujos (estaesmamá, por
ejemplo), que tienen un significado muy personal y poco estable. Lo que empezó
siendo un caballo se convierte a mitad de camino en una casa, que tal vez se
transforme luego en un barco. De manera que lo que parece una mezcla irreconocible
de formas y colores puede ser, en realidad, una combinación de varios intentos
superpuestos.
5. "Un caballo"
4. Etapa pre esquemática:
Se presenta a los 3 o 4 años aproximadamente, se supera alrededor de los cinco o
cinco años y medio. Se caracterizapor la búsqueda consciente de una forma en el
momento de dibujar.Aparecen los primeros dibujos de personas que suelen consistir
en un círculo con marcas que representan los ojos, la nariz y la boca, que pueden estar
en cualquier posición del rostro.
En un próximo paso el niño agrega las orejas y el pelo en forma de
ondulaciones que rodean la cabeza.
6. Luego aparecen los brazos: rígidos, a manera de palos a los costados de la
cabeza, terminan en un puño con forma de maza o en una eclosión de dedos (si son
cinco, seguramente es por accidente). Y dos piernas tiesas, sin articulaciones, se
desprenden directamente de la cabeza y terminan en una pelota a modo de pie. Es lo
que llaman monigote renacuajo o célula.
Aparece luego el torso en forma de un tosco óvalo o rectángulo, al que se
adosan las piernas. Es probable que la cabeza y el torso permanezcan yuxtapuestos
durante algún tiempo, sin cuello que los una. En estas representaciones pictóricas
suele haber una acción implícita, que por lo general hay que inferir a través de la
inclusión de objetos como una bicicleta o un martillo, o bien de los comentarios que
las acompañan.
Cambia muy a menudo la forma de representar un mismo objeto.
5. Dibujos con transparencia:
Entre los cinco y seis años son muy característicos estos dibujos.Las paredes de
las casas, los autos, la ropa de la gente dejan ver su interior: Por el momento, los
dibujos no respetan proporciones reales: el tamaño de las personas y objetos está en
7. función de la importancia que el niño les dé. Los coloresqueutilizatampoco guardan
relación con la realidad.
Podemos hablar de un pasaje entre las etapas pre-esquemática y esquemática
que se inicia entre los cinco o cinco años y medio y se supera alrededor de los seis
años y medio o siete.
Aquí el niño busca que lo que dibuja represente lo que sabe de ese objeto.
Aparecen la línea del suelo, o la franja del cielo.
El color sigue siendo subjetivo, excepto para algunos elementos de la naturaleza,
árboles, cielo, sol, etc.
Hacia la finalización de la fase, la forma representativa de cada objeto se va
estabilizando, no la cambia con tanta frecuencia con lo que lo hacía antes.
Los objetos representados pueden aparecer a veces por razones expresivas o
emocionales algunas alteraciones formales, tales como supresión de partes,
exageración de tamaños, del número de elementos o detalles, color notoriamente
diferenciador, etc. Estas alteraciones transitorias, muy positivas, indican una relación
flexible del niño con su medio.
El dibujo para un niño es mucho más que un ejercicio agradable, es el medio
8. gracias al cual desarrolla relaciones y concreta pensamientos vagos que pueden ser
importantes para él. El dibujo se convierte en sí mismo en una experiencia de
aprendizaje.
Las producciones gráficas de los niños irán perfeccionándose y
enriqueciéndose a medida que evolucionan las áreas cognitiva, social y afectiva.
9. CONCLUSIÓN
El dibujo infantil favorece la escritura, la lectura, la creatividad, ayuda al niño a
tener más confianza en sí mismo, a expresar sus sentimientos y a madurar
psicológicamente. En el dibujo infantil tan importante es la habilidad, que consigue
con el trabajo y la práctica habitual, como el talento innato que un niño pueda tener
para dibujo. La espontaneidad, la utilización de los colores, la grafía, la disposición
de los elementos son sólo algunos de los matices que analizan los psicólogos para que
los dibujos de los niños nos hablen de su personalidad, de sus emociones, de sus
circunstancias, de su estado de ánimo, sus complejos, sus miedos, sus emociones,
todo aquello que está en su subconsciente y que sale a flote por medio del trazo o el
color... Detrás de un dibujo infantil, libre y espontáneo se esconden muchísimas
cosas.