1. EL TUTOR EN EDUCACIÓN
PRIMARIA
Educación y Sociedad
Elena

2. EL TUTOR EN EDUCACIÓN PRIMARIA
El día nueve de Mayo, nuestras compañeras nos expusieron el que era su tema de
investigación: El tutor en educación primaria. A continuación recogeré un breve resumen de lo
que pude extraer de esta exposición.
En primer lugar se ha de decir que la intervención tutorial es un primer estadio de
acción orientadora y se encuentra conexionada estrechamente. Así, es tutor es el maestro
encargado “de la docencia y la orientación de un grupo de alumnos que es nombrados por el
Director”.
De entres sus funciones, se destacaron en clase, las siguientes: Atender las dificultades
de aprendizaje de los alumnos, orienta a sus alumnos sobre sus posibilidades educativas,
coordina el proceso de evaluación del alumnado, informa a los padres, profesores y alumnos
del grupo de todo aquello que pueda interesarles y atender y cuidar al alumnado tanto en
clase, como en actividades no lectivas.
Por otro lado, se ha de hacer referencia a cuáles pueden ser las características que
debería reunir ese tutor idílico, de entre las que se destacan las siguientes: Madurez personal,
ser respetuoso, saber escuchar, aceptación incondicional, autenticidad, ser comprensivo,
liderazgo, ser exigente, empatía, consistencia ética, confianza, así como ser motivador y
reflexivo.
Este es quizá, unos de los temas que más centraron mi atención en la exposición: el
relativo a las actuaciones que el profesor-tutor debe llevar a cabo respecto a otros de los
importantes agentes en materia educativa: los alumnos, los padres y los otros docentes. Así, se
dieron las siguientes directrices.
- Con respecto a los alumnos, el tutor pretende enseñarles a convivir, a cumplir normas
de convivencia, fomentar la cooperación y la solidaridad. Además de enseñarles a ser
persona, a pensar y a decidirse.
- En relación a los padres, el tutor puede relacionarse con ellos de dos formas:
Individualmente (informarles del desarrollo académico o cualquier otro aspecto
relacionado con la formación de su hijo, orientar a los padres en la tarea educativa de
su hijo y planificar conjuntamente con los padres unas pautas a seguir) o grupalmente:
reunir a los padres a comienzo del curso, para informales sobre la hora de visita y la
atención tutorial, la composición del equipo educativo, las líneas generales de
actuación y los criterios de evaluación. Conseguir la colaboración de los padres en
relación con el trabajo personal de sus hijos. Orientar a los padres en los planes de
estudios. Coordinar charlas sobre temas formativos o informativos de interés general.
- Y, en lo referido a los otros docentes, el tutor debe coordinar la elaboración de
adaptaciones curriculares, así como asesorar al equipo sobre el tema relacionado al
tratamiento de los alumnos.

3. Por otro lado, en lo referido a la relación entre el tutor y la familia, se ha de destacar
una de las grandes fuentes de comunicación entre ambos, la entrevista. De ella, se puede
hablar de que se persiguen los siguientes objetivos: intercambiar información, resolver
conflictos, analizar el comportamiento, conocer las opiniones de las dos partes.
Si hablamos del comportamiento de los padres, se recomienda que sean puntuales,
deben preparar la entrevista, conversas con los hijos, tener una actitud positiva, valorar
opinión del profesor y establecer objetivos.
Por su parte, los tutores, antes de la entrevista debe informarse del alumno, y debe
prepara el lugar de la entrevista, durante la entrevista debe crear un buen clima, transmitir
confianza y seguridad, comprensividad y empatía, no hacer alardes de autoridad, no crear
situaciones incómodas, no crear una situación de prisa y al final de la entrevista se debe
resumir todo lo que han tratado, realizar una evaluación para comprobar si los objetivos
propuestos se han logrado cumplir.
Pero, no siempre es posible cumplir todos estos requisitos, por lo que a veces pueden
surgir una serie de conflictos, que se recogen en los siguientes apartados:
a) ¿Cómo el tutor trata la obediencia en clase? Obedecer (cumplir las normas
consensuadas por el grupo o impuestas por una organización para la optimización del
grupo) Sugerencias para mejorar la obediencia de los alumnos: mantener contacto
visual, situarse cerca, tono de voz apacible pero firme, controlar las emociones, utilizar
demanda directa en vez de preguntar, no repetir una demanda más de dos veces y
REFORZAR.
b) Resolución de problemas junto al tutor en clase: Varios sistemas, este es uno, fases:
Orientación hacia el problema definición y formulación, posibles soluciones, toma de
decisiones y puesta en práctica y verificación de la solución.
c) Simulaciones: Role-playing. Este pertenece favorecer que los alumnos hagan sus
propios descubrimientos respecto de ellos mismo y de su entorno. Ventajas:
Motivador y crea un ambiente de gran participación. Acerca al grupo a problemas de la
vida real. Permite bajar del campo de la abstracción al de la realidad. El juego se
convierte en un instrumento de trabajo y evaluación.
Finalmente, tan solo queda por añadir qué es la tutoría y cuáles son sus funciones. En
lo referente al primer apartado, se dice que Su labor es dar respuesta a posibles necesidades,
que los alumnos tienen. El tutor es el que orienta al niño y le facilita y le intenta ayudar a
solucionar sus problemas. Y con ello, se indica que las funciones de la tutoría quedan
recogidas en el Artículo del Decreto 43/2005, que dice que la tutoría debe: “Desarrollar con el
alumnado programas relativos a la mediación y mejor de la convivencia, a los hábitos y
técnicas de estudio, a la toma de decisiones y al pensamiento creativo y emprendedor.
Facilitar el intercambio y la coherencia del proceso educativo con las familiar. Coordinar al
profesorado que interviene en un mismo grupo de alumnos para garantizar la coherencia del
proceso de enseñanza y aprendizaje”.

4. COMENTARIO
El tema que expusieron nuestras compañeras, puede tratarse sin duda de uno de los
más interesantes para nosotros, en relación con nuestra futura labor como docente. Cuando
estamos en la piel de alumnos, no llegamos a valorar realmente la importancia tan grande que
tiene un tutor, pues para los más pequeños es tan solo un profesor más. Ahora, desde la piel
de futuros profesores, hemos tenido que empezar a valorar todas y cada una de las
importantísimas funciones que han de desempeñar estas figuras.
Sin duda alguna, uno de los puntos que con más fuerza me llegó, fue el referido las
características que debía poseer un tutor, en busca de que él pudiera desempeñar
perfectamente su labor. Parece increíble que todos esos rasgos puedan y deban reunirse en
una sola persona, con el objetivo así de conseguir que haga el mayor bien hacia los alumnos
ante los que se enfrenta. Por ello, sí considero que puede resultar realmente positivo el hecho
de que se pudiera incluir en nuestra formación universitaria, alguna materia o taller que nos
ayudara a desarrollar estas capacidades humanas y personales tan necesarias para poder
desempeñar correctamente una función, que algún día, recaerá sobre nosotros.
Dejando de lado esta singularidad hacia el tutor, he de hablar ahora de la relación que
este debe mantener con las familias de sus alumnos.
Tal y como se ha abordado en la exposición, son muchas las ocasiones en las que, por
un lado o por otro, estas relaciones tan necesarias entre familia-escuela, se ven minadas e
incluso rotas. Tanto desde el punto de vista de padres, como los profesores, hemos de darnos
cuenta de que todos debemos poner nuestro “granito de arena” para poder hacer que ese
contacto sea cada vez más y más fluido, en busca siempre de lo mejor para el más pequeño,
aquel que no debe pagar por lo errores de los adultos.
Así, puedo decir que, considero realmente positivo el hecho de que profesores y
padres tengan entrevistas personales, al menos una o dos por curso. Y, por supuesto, ambos
deben poner de su parte para acudir a ellas y para que estas sean lo más fructíferas posible.
Los padres deben deshacerse de esa idea de que los profesores tan solo acuden a ellos cuando
algo va mal en sus hijos, idea que debe ser rota por el profesor, quien también debe
comunicarse con la familia para resaltar lo positivo que pueda tener su alumno. Con ellos,
hago referencia a la importancia del refuerzo al más pequeño, refuerzo que además, a veces,
también necesitan los padres.
Con todo ello, se muestra claramente mi orientación hacia la importancia de la
participación de las familias en el ámbito escolar. Ellas, como uno de los grandes núcleos del
desarrollo de sus hijos, acompañado del otro gran pilar, la escuela, deben ir juntas, de la mano,
para guiar al más pequeño en su largo camino de aprendizaje a lo largo de sus primero años de
vida.