2. Los alimentos que consumes
pueden ser la medicina más segura
y potente, o el veneno más lento.
Ann Wigmore
ii
3. A Dios, a nuestros padres y profesores que
nos brindaron su apoyo y nos enseñaron
a luchar por los objetivos de la vida.
iii
4. ÍNDICE
pág.
Epígrafe ii
Dedicatoria iii
Agradecimiento iv
Introducción vii
CAPÍTULO I
ASPECTOS GENERALES
1.1 La etapa infantil 9
1.1.1 Definición 9
1.1.2 Características 10
1.1.2.1 Desarrollo fisiológico 10
1.1.2.2 Desarrollo cognitivo 10
1.2 Tipos de alimentación 11
1.2.1 Esquema de alimentación de acuerdo a la edad del infante 11
1.2.1.1 0 – 6 meses 11
1.2.1.2 6 – 1 año 11
1.2.1.3 1 – 2 años 12
1.3 Alimentación complementaria 12
1.3.1 Definición 12
iv
5. 1.3.2 La leche materna 13
1.3.3 Proporción de micronutrientes y macronutrientes 14
Conclusiones
Referencias
INTRODUCCIÓN
En el Perú, existe un gran número de personas con anemia por la desnutrición moderada,
dicho problema proviene básicamente de los sectores populares. La mala alimentación se da por
los bajos recursos económicos y la poca educación recibida en cuanto a una adecuada
alimentación. Entender la problemática de la alimentación complementaria implica analizar la
educación básica de los padres, que se ve reflejada en el crecimiento y desarrollo de los hijos.
El objetivo principal de la investigación es concientizar, de modo tal, que los padres brinden
una adecuada suplementación en sus menores hijos. Ello implica definir la etapa infantil y
suplementar adecuadamente dentro de sus diferentes edades o requerimientos nutricionales
además de realizar una evaluación antropométrica.
Es importante la aplicación de este estudio porque contribuye al trabajo demostrativo de lo
que buscan varios padres de familias dentro de una adecuada alimentación. Los resultados de
estudio servirán de base a estudios posteriores en las diversas áreas del campo de la nutrición.
La presente monografía está organizada en dos capítulos: en el primero, se abordan los
aspectos generales del trabajo; y el segundo, se presentan la definición, los tipos y las
características de la alimentación complementaria en infantes, así como las consecuencias de una
carencia de nutrientes.
En definitiva, se espera que este trabajo de investigación aporte al análisis, debate y reflexión
sobre uno de los aspectos más importantes del estudio: la alimentación complementaria en
infantes. Por ello se les invita a ser parte del debate a través de la lectura de este estudio.
v
8. La vida se divide en diferentes etapas; sin embargo se destaca una por ser la base de todas,
ya que se caracteriza por ser la más vulnerable, de modo que necesita la atención y afecto de
los padres, esta es la etapa infantil.
Se recomienda tener el apoyo, observación y afecto de los padres para desarrollar las
capacidades del infante en todo aspecto, destacando la nutrición por ser el principal factor de
progreso de una persona. Así mismo se debe tener pensamientos positivos en el entorno del
infante, para favorecer su desarrollo cognitivo, comunicación y adaptación.
1.1 Etapa infantil
La etapa infantil es la fase de la vida que comprende el nacimiento y la adolescencia. Es
considerada la raíz de la evolución de un ser humano, ya que en esta intervienen muchos
factores que serán el precedente del éxito o fracaso del futuro adulto. En este periodo, se
debe desarrollar a nivel físico y fisiológico el potencial del infante.
1.1.1 Definición
La etapa infantil es la base de la personalidad que se refuerza con la
importancia del desarrollo, de modo que influye en el estado y condición de la
vida de un infante. Es el periodo de la vida humana que comprende entre el
nacimiento y la adolescencia o comienzo de la pubertad.
La infancia se considera el momento clave en la vida de cualquier ser humano,
ya que es donde se forma los soportes afectivos e intelectuales de la persona, del
cual dependerá el éxito o fracaso del individuo una vez adulto. La estimulación
temprana, los juegos didácticos y la cercanía del niño con las herramientas
pedagógicas permitirán prepararlo para su inicio en la etapa preescolar, a partir
de los tres a cinco años.1
Se deduce que la infancia es la primera etapa de la vida: fundamental para el
desarrollo óptimo del infante; sin embargo, dependerá de la evolución y
características físicas, motrices y socio afectivas.
Se infiere que, el infante es un individuo que aprende a socializar y adaptarse.
Al mismo tiempo adquiere las bases y facultades físico - mentales para
enfrentarse a su entorno que favorecen a su desarrollo psicomotor y cognitivo.
8
9. 1.1.2 Características
En etapa infantil, se desarrolla el pensamiento, juicio, sensibilidad, ética,
conciencia moral, tolerancia, sentido de la gratitud y el arte de ser feliz. Consiste en
lograr que cada niño desarrolle al máximo su potencial y crezca en todas las
dimensiones.
1.1.2.1 Desarrollo fisiológico
En los niños, los cambios pueden producir cierta ansiedad ante lo
desconocido, ya que no cuentan con la madurez necesaria y no son capaces
de valorar las situaciones que van a vivir. Los padres son la base y raíces,
por eso se debe ofrecer la confianza que necesitan durante el cambio.
En esta etapa surgen cambios progresivos a nivel funcional del niño
que permite un mejor desarrollo psicomotor para poder realizar
actividades físicas a nivel de su entorno. 2
En este sentido, el desarrollo cognitivo permite cambios progresivos
para aumentar la capacidad, coordinación y resistencia; mientras que en
el fisiológico se desarrolla la maduración ósea y cerebral propia de sus
cambios, lo cual requiere un aporte adecuado de sustancias nutritivas
para que produzcan distintas hormonas favorables en el organismo.
1.1.2.2 Desarrollo cognitivo
El desarrollo cognitivo en el niño implica áreas de desarrollo a nivel
psicológico. Este proceso es continuo y global. Esta etapa se manifiesta por
una disminución gradual del pensamiento egocéntrico y por la capacidad
creciente de centrarse en más de un aspecto ante un estímulo. Además
posee la capacidad racional de poder diferenciar objetos. 2
Así el infante desarrolla su inteligencia que se complementa con el
desarrollo emocional y afectivo. Debe existir una base para poder
potencializar al niño, de mismo modo que favorezca al nivel cognitivo y
estimulación en el área sensorial y motriz para desarrollar conductas a base
de su experiencia a nivel de su destreza motriz.
9
10. 1.2 Tipos de alimentación
Existe una alimentación diferente para cada una de las distintas etapas de la vida,
dentro de ellas, la infancia es la más importante; pues se subdivide por edades.
1.2.1 Esquema de alimentación de acuerdo a la edad del infante
El infante requiere una alimentación balanceada que obtendrá de los
alimentos ricos en micro y macronutrientes, ya que con ellos se contribuirá a un
desarrollo óptimo del niño. Sin embargo, la cantidad de nutrientes dependerá de
las necesidades nutricionales en cuanto a las edades.
1.2.1.1 0 – 6 meses
Los primeros meses de vida que comprende de 0 – 6 meses se
considera lactante; al niño; por ello, es recomendable la leche materna
exclusiva que aporta inmunoglobulinas al recién nacido.
Los requerimientos calóricos promedio del recién nacido en los 6
primeros meses de vida es de 108 cal/kg del peso corporal. Los motivos de
sus necesidades calóricas son el peso, la talla, el ciclo de sueño, la vigilia,
el clima, la actividad física, el metabolismo y sobre todo el estado de
salud. En realidad, hay muy poca información del gasto de energía de un
lactante, para llegar a la conclusión de sus necesidades calóricas. 2
Las últimas recomendaciones, sobre la alimentación en el lactante
durante los 6 primeros meses de vida, se basan en la leche materna. Sin
embargo no debe introducirse alimentos sólidos ni líquidos, si se deja dar
leche materna se sugiere optar por fórmula infantil, cuya ingesta debe ser
500c/c del leche al día.
1.2.1.2 6 meses – 1 año
A partir de los seis meses de vida del niño es recomendable
introducir alimentos sólidos o semisólidos para cubrir las necesidades
del bebé. La alimentación a partir de los 6 meses al año es el periodo en
el cual se introduce alimentos que requieren cantidad de energía. Estos
10
11. deben ser dados al niño de manera paulatina y progresiva de acuerdo a
sus necesidades, es decir, se debe dar un alimento nuevo por vez e ir
agregando diversos tipos para variar y complementar su alimentación.3
La ingestión de nuevos alimentos para el bebé es recomendable para
lograr un desarrollo óptimo a nivel funcional y corporal, tanto así como
la maduración de sus estructuras.
En suma, la alimentación después de los 6 meses del bebé es
fundamental para su crecimiento, su peso y longitud durante los
primeros años de vida.
1.2.1.3 1 – 2 años
En esta edad (1 a 2 años), el niño puede experimentar una comida más
completa, aún imitan los hábitos de los padres; por ello, se debe
implementar su alimentación.
Además, El infante de 1 a 2 años comienza a mostrar independencia de
los padres, aparecen diferentes tendencias con respecto a los hábitos
alimentarios, es decir, muestra preferencia o rechazo por determinados
alimentos. Es importante que los alimentos aporten no solo energía sino
ayuden a fortalecer las defensas naturales del niño.1
Cabe destacar que la alimentación tiene que ser variada y equilibrada;
no obstante, a los gustos del niño. La alimentación sana influye en la
actividad física, donde destaca el juego. Así mismo debe cubrir las
necesidades básicas y nutricionales para un óptimo desarrollo.
1.3 Alimentación complementaria
La alimentación complementaria es un tipo de suplementación importante en la
formación del niño, ya que contribuirá a su desarrollo físico y funcional, es decir, en el
sistema inmunológico para evitar enfermedades no transmisibles.
1.3.1 Definición
11
12. La alimentación complementaria es una fase que se realiza cuando el niño deja
de lactar para pasar a consumir alimentos sólidos. Cuando la lactancia deja de ser
suficiente para las necesidades de alimentación del bebé, es imprescindible añadir
alimentos complementarios a su dieta.
En este proceso, se le da al niño un complemento nutricional y además se acerca
a la inducción de esta para que, finalmente, forme parte de una dieta definitiva. Los
alimentos deben proporcionarse y consumirse en condiciones favorables, para
evitar la contaminación y el adquirir patologías. 4
Se deduce que después de la lactancia es necesario dar alimentación
complementaria para que el niño en el futuro forme una dieta definitiva; por eso,
es imprescindible que consuma alimentos sólidos que será su forma de
alimentación durante toda su vida.
1.3.2 La leche materna
La leche materna es esencial para el recién nacido durante los seis primeros
meses de edad, ya que el bebé en esta etapa adquiere proteínas y sustancias
inmunológica para su buen desarrollo.
Las diversas organizaciones recomiendan el amamantamiento durante los
primeros 6 meses de vida. La leche materna tiene similitud a las leches de otros
mamíferos por la composición de sus nutrientes. Las proteínas de la leche materna
lactalbúmina y otras proteínas, como el suero de la leche, son fáciles de digerir para
el lactante y causan menos estrés a los riñones inmaduros.
La leche materna o leche de animales mamíferos absorben más hierro por las
proteínas, como la lactoferrina, que en las fórmulas infantiles. Por consiguiente, los
lactantes necesitan alimentarse hasta llegar a obtener las calorías que la leche, rica
en grasas, les puede brindar, para quedar satisfecho entre las sesiones alimenticias
y de esta manera desarrollan su crecimiento. 9
Cabe destacar que la leche materna contiene proteínas, entre ellas la del suero
que es de fácil absorción para el recién nacido, también causa menos estrés a los
riñones inmaduros. Por todo esto, el bebé debe consumir la leche materna para
obtener las calorías necesarias que tiene que consumir.
12
13. Según estudios, se deduce que la leche materna es el principal alimento de un
bebé por sus múltiples beneficios para su desarrollo y salud.
1.3.3 Proporción de micronutrientes y macronutrientes
La alimentación complementaria debe contener micronutrientes y
macronutrientes, pero hay que saber diferenciar que la alimentación de un adulto
es muy distinta a la de un bebé o niño pequeño. La necesidad nutricional de un
lactante comienza con la ingesta de sólidos, estos proporcionan mayor energía, que
la leche materna. Esto se da a partir de los primeros años.
La cantidad de macronutrientes que necesita un bebé es muy diferente a la de
un adulto. La leche de fórmula y leche materna son muy ricas en grasas y le aporta
un 50 % de la energía total. El aporte de leche humana y alimentos
complementarios para el bebé de 7 – 12 meses de edad se establece en 95 g/día.
La leche para lactantes aporta más proteínas que la leche materna, pero la
desventaja es que la primera es muy difícil de digerir en el organismo de un bebé. El
hierro, la vitamina D, el zinc y el fluoruro son los micronutrientes más importantes
para los bebés; en cambio, las madres veganas les aportan vitamina B12.
A los infantes se les pone una inyección de vitamina K al momento de nacer
hasta que el intestino del bebé pueda tener sus propias bacterias que por sí mismas
fabrican vitamina K. 6
Las necesidades calóricas y proteicas del recién nacido deben ser cubiertas
teniendo en cuenta muchos factores para su desarrollo.
13
14. Nutricionalmente, llevó una dieta adecuada durante su primer año: lactancia
dos meses, continuada de frutas verduras y cereales a temprana edad, de 4 a 5
meses, cereales y gluten, a los 6 meses, verduras y pollo. 10
Con ello se observó que la ingesta a tan temprana edad de cereales le generó al
infante una intolerancia, lo que provocó una enfermedad de por vida que debe
tratarse con restricciones de gluten. Para controlar la enfermedad celiaca se
establece una dieta de forma estricta: sin lactosa ni gluten solo con productos
naturales.
En síntesis, para determinar el tipo de alimentación complementaria que se va a emplear es
importante analizar las características del infante y de esta manera determinar su estado
físico, funcional y cognitivo proporcionando los nutrientes respecto a la alimentación que se va
emplear en la etapa preescolar. También se debe tener sumo cuidado con las intolerancias
hacia ciertos alimentos para moldear la dieta del infante. Además se recomienda seguir las
sugerencias dietéticas para el infante y formar en el hogar buenos hábitos alimentarios para
no padecer consecuencias como infecciones digestivas.
14
15. CONCLUSIONES
1. La etapa infantil se caracteriza por ser el período de cambios constantes en todo nivel
y por destinar el futuro del niño; así mismo, se necesita la observación y apoyo de los
padres para seguir en todo momento las prácticas saludables, y formar con éxito las
diversas capacidades del niño.
2. La alimentación complementaria posterior a la lactancia materna exclusiva es
importante para la adaptación del infante a la variedad de alimentos que existen, ya
que de estos absorberá nutrientes importantes para su evolución.
3. El crecimiento y desarrollo es sinónimo de progreso físico y fisiológico, que se obtienen
por la ingesta de macro y micronutrientes en la dieta del infante; no obstante, si son
proporciones precarias, acompañadas de la pobre observación por parte de los padres,
se puede afectar dichos progresos.
4. Las recomendaciones dietéticas de un infante deben distribuirse en su dieta en cuatro
raciones, pues la cantidad de 1.300 kcal debe ser el valor energético consumido
durante el día; además debe ser equilibrada y balanceada.
15
16. Referencias bibliográficas
1. López A. y Cruz L. Las etapas de la vida: cómo entender los cambios, el reto de vivir con
significado y la crisis de cada etapa. 2. a
ed. México: Trillas; 2008.
2. Brown. J. Nutrición en las diferentes etapas de la vida. 3.a
ed. México D.F: Mc Graw
Hill; 2008.
3. Hernández M. Alimentación infantil. 3.a
ed. Madrid: Díaz de Santos; 2001.
4. Madrazo J. Nutrición y gastroenterología pediátrica. México D.F: Mc Graw-Hill; 2013.
5. Gibney M., McDonald I. y Roche H. Nutrición y metabolismo. Zaragoza: Acribia; 2003.
6. Thompson J., Manore M. y Vaughan L. Nutrición. Madrid: Pearson Educación; 2008.
7. Asaduroglu A. Manual de nutrición y alimentación humana. Córdoba: Brujas; 2011.
8. Suverza A. y Navarro K. El ABCD de la evaluación del estado de nutrición. México D.F:
Mc Graw-Hill; 2010.
9. Bredbenner C., Moe G., Beshgetoor D. y Berning J. Perspectivas en nutrición. 8.a
ed.
México D.F: Mc Graw-Hill; 2010.
10. Sierra C. Casos clínicos en nutrición infantil. Madrid: Ergon; 2011.
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