Enviar búsqueda
Cargar
Mantener el amor a través de la naturalidad y la comunicación
•
0 recomendaciones
•
97 vistas
Título mejorado por IA
Fernando Alarcón
Seguir
Denunciar
Compartir
Denunciar
Compartir
1 de 1
Descargar ahora
Descargar para leer sin conexión
Recomendados
Carlos lopez
Carlos lopez
guestfdc66ab8
Certamen De Cartas De Amor De Barakaldo dos mil quince
Certamen De Cartas De Amor De Barakaldo dos mil quince
rene0manning8
El bizarro mundo real, 3° edición, "Amor, erotismo y lujuria"
El bizarro mundo real, 3° edición, "Amor, erotismo y lujuria"
Bizarro Mundo Real
¿Qué puede ofrecer un viejo profesor a las nuevas generaciones?
¿Qué puede ofrecer un viejo profesor a las nuevas generaciones?
Hael Journal
Adiosde gabrielmarquez
Adiosde gabrielmarquez
moralvatti
001 hellinger - cuentos de vida
001 hellinger - cuentos de vida
AnaRequena12
Por un simple beso
Por un simple beso
jbenazo
Modos de saludar
Modos de saludar
Diego Manosalva Ortiz
Recomendados
Carlos lopez
Carlos lopez
guestfdc66ab8
Certamen De Cartas De Amor De Barakaldo dos mil quince
Certamen De Cartas De Amor De Barakaldo dos mil quince
rene0manning8
El bizarro mundo real, 3° edición, "Amor, erotismo y lujuria"
El bizarro mundo real, 3° edición, "Amor, erotismo y lujuria"
Bizarro Mundo Real
¿Qué puede ofrecer un viejo profesor a las nuevas generaciones?
¿Qué puede ofrecer un viejo profesor a las nuevas generaciones?
Hael Journal
Adiosde gabrielmarquez
Adiosde gabrielmarquez
moralvatti
001 hellinger - cuentos de vida
001 hellinger - cuentos de vida
AnaRequena12
Por un simple beso
Por un simple beso
jbenazo
Modos de saludar
Modos de saludar
Diego Manosalva Ortiz
He sido infiel».pptx. paola yahid
He sido infiel».pptx. paola yahid
RoxanaLombardo
La esposa y la otra
La esposa y la otra
guestfdeaeb
La espera
La espera
martahequera
La espera
La espera
ESPEJO 25
El techo de oro ( prosa poética)
El techo de oro ( prosa poética)
tomasvila
De profundis
De profundis
jeftuni
Adiós de Gabriel Marquez
Adiós de Gabriel Marquez
Karen Daniela Bejarano Agudelo
Adiosdegabrielmarquez
Adiosdegabrielmarquez
Karen Daniela Bejarano Agudelo
Amanda (prosa poetica)
Amanda (prosa poetica)
tomasvila
por que decimos que la vida no es linda
por que decimos que la vida no es linda
danii1210
Van gogh tango - vida
Van gogh tango - vida
Carlos Alberto Lecce
El machismo
El machismo
angelarivero13
Mirame de Lin Lane
Mirame de Lin Lane
Cruella Devil
Guayacana 11 De Julio Del 2008
Guayacana 11 De Julio Del 2008
josesito10
Las 5 trampas del amor pdf
Las 5 trampas del amor pdf
Zulma Bernal
La Espera, lindos quadros de pintores famosos
La Espera, lindos quadros de pintores famosos
Oracy Filho
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 86
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 86
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 92
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 92
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 89
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 89
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 91
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 91
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 101
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 101
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 103
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 103
Fernando Alarcón
Más contenido relacionado
La actualidad más candente
He sido infiel».pptx. paola yahid
He sido infiel».pptx. paola yahid
RoxanaLombardo
La esposa y la otra
La esposa y la otra
guestfdeaeb
La espera
La espera
martahequera
La espera
La espera
ESPEJO 25
El techo de oro ( prosa poética)
El techo de oro ( prosa poética)
tomasvila
De profundis
De profundis
jeftuni
Adiós de Gabriel Marquez
Adiós de Gabriel Marquez
Karen Daniela Bejarano Agudelo
Adiosdegabrielmarquez
Adiosdegabrielmarquez
Karen Daniela Bejarano Agudelo
Amanda (prosa poetica)
Amanda (prosa poetica)
tomasvila
por que decimos que la vida no es linda
por que decimos que la vida no es linda
danii1210
Van gogh tango - vida
Van gogh tango - vida
Carlos Alberto Lecce
El machismo
El machismo
angelarivero13
Mirame de Lin Lane
Mirame de Lin Lane
Cruella Devil
Guayacana 11 De Julio Del 2008
Guayacana 11 De Julio Del 2008
josesito10
Las 5 trampas del amor pdf
Las 5 trampas del amor pdf
Zulma Bernal
La Espera, lindos quadros de pintores famosos
La Espera, lindos quadros de pintores famosos
Oracy Filho
La actualidad más candente
(16)
He sido infiel».pptx. paola yahid
He sido infiel».pptx. paola yahid
La esposa y la otra
La esposa y la otra
La espera
La espera
La espera
La espera
El techo de oro ( prosa poética)
El techo de oro ( prosa poética)
De profundis
De profundis
Adiós de Gabriel Marquez
Adiós de Gabriel Marquez
Adiosdegabrielmarquez
Adiosdegabrielmarquez
Amanda (prosa poetica)
Amanda (prosa poetica)
por que decimos que la vida no es linda
por que decimos que la vida no es linda
Van gogh tango - vida
Van gogh tango - vida
El machismo
El machismo
Mirame de Lin Lane
Mirame de Lin Lane
Guayacana 11 De Julio Del 2008
Guayacana 11 De Julio Del 2008
Las 5 trampas del amor pdf
Las 5 trampas del amor pdf
La Espera, lindos quadros de pintores famosos
La Espera, lindos quadros de pintores famosos
Destacado
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 86
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 86
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 92
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 92
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 89
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 89
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 91
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 91
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 101
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 101
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 103
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 103
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 99
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 99
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 93
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 93
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 100
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 100
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 88
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 88
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. i no. 15
La narrativa del conocimiento vol. i no. 15
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. v no. 107
La narrativa del conocimiento vol. v no. 107
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 96
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 96
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 95
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 95
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 90
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 90
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. i no. 8
La narrativa del conocimiento vol. i no. 8
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. v no. 106
La narrativa del conocimiento vol. v no. 106
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. i no. 13
La narrativa del conocimiento vol. i no. 13
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 85
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 85
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 98
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 98
Fernando Alarcón
Destacado
(20)
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 86
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 86
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 92
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 92
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 89
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 89
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 91
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 91
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 101
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 101
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 103
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 103
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 99
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 99
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 93
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 93
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 100
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 100
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 88
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 88
La narrativa del conocimiento vol. i no. 15
La narrativa del conocimiento vol. i no. 15
La narrativa del conocimiento vol. v no. 107
La narrativa del conocimiento vol. v no. 107
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 96
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 96
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 95
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 95
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 90
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 90
La narrativa del conocimiento vol. i no. 8
La narrativa del conocimiento vol. i no. 8
La narrativa del conocimiento vol. v no. 106
La narrativa del conocimiento vol. v no. 106
La narrativa del conocimiento vol. i no. 13
La narrativa del conocimiento vol. i no. 13
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 85
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 85
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 98
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 98
Similar a Mantener el amor a través de la naturalidad y la comunicación
Veronica lozada trabajo final
Veronica lozada trabajo final
♥♥♥...Nia....♥♥♥ Nuñez
Me declaro vivo
Me declaro vivo
http://mentecorazonglobal.blogspot.com/ .
Me declaro vivo
Me declaro vivo
Marcos Neumann
Me Declaro Viv@
Me Declaro Viv@
javisromo
Etica (1)
Etica (1)
yamithgutierrez
AFORISMOS César Juarros (1879-1942)
AFORISMOS César Juarros (1879-1942)
JulioPollinoTamayo
El amor y sus inquietudes en la vida lucho
El amor y sus inquietudes en la vida lucho
luis1411
DISPERSIONES (1910) Natalie Clifford Barney
DISPERSIONES (1910) Natalie Clifford Barney
JulioPollinoTamayo
Refleja[1]. Me Declaro Vivo.
Refleja[1]. Me Declaro Vivo.
Fernando Flores
Refleja. Me declaro Vivo.
Refleja. Me declaro Vivo.
Refleja tu Amor
Refleja. me declaro vivo.
Refleja. me declaro vivo.
DetodoconNinos
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 35
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 35
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 56
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 56
Fernando Alarcón
Vivo B23
Vivo B23
Silvano Leonardo Gomez A.
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 29
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 29
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 42
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 42
Fernando Alarcón
Digámosnos las verdades.
Digámosnos las verdades.
Armando Arzalluz
Las mujeres son un mal necesario
Las mujeres son un mal necesario
Alma Mendez
Me Declaro Vivo
Me Declaro Vivo
JOIGNAKI
Me Declaro Vivo
Me Declaro Vivo
TheBerugo
Similar a Mantener el amor a través de la naturalidad y la comunicación
(20)
Veronica lozada trabajo final
Veronica lozada trabajo final
Me declaro vivo
Me declaro vivo
Me declaro vivo
Me declaro vivo
Me Declaro Viv@
Me Declaro Viv@
Etica (1)
Etica (1)
AFORISMOS César Juarros (1879-1942)
AFORISMOS César Juarros (1879-1942)
El amor y sus inquietudes en la vida lucho
El amor y sus inquietudes en la vida lucho
DISPERSIONES (1910) Natalie Clifford Barney
DISPERSIONES (1910) Natalie Clifford Barney
Refleja[1]. Me Declaro Vivo.
Refleja[1]. Me Declaro Vivo.
Refleja. Me declaro Vivo.
Refleja. Me declaro Vivo.
Refleja. me declaro vivo.
Refleja. me declaro vivo.
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 35
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 35
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 56
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 56
Vivo B23
Vivo B23
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 29
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 29
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 42
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 42
Digámosnos las verdades.
Digámosnos las verdades.
Las mujeres son un mal necesario
Las mujeres son un mal necesario
Me Declaro Vivo
Me Declaro Vivo
Me Declaro Vivo
Me Declaro Vivo
Más de Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. v no. 105
La narrativa del conocimiento vol. v no. 105
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 97
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 97
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 55
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 55
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 54
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 54
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 53
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 53
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 52
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 52
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 51
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 51
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 50
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 50
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 49
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 49
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 48
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 48
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47a extra año nuevo
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47a extra año nuevo
Fernando Alarcón
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47
Fernando Alarcón
Más de Fernando Alarcón
(12)
La narrativa del conocimiento vol. v no. 105
La narrativa del conocimiento vol. v no. 105
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 97
La narrativa del conocimiento vol. iv no. 97
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 55
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 55
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 54
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 54
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 53
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 53
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 52
La narrativa del conocimiento vol. iii no. 52
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 51
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 51
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 50
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 50
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 49
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 49
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 48
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 48
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47a extra año nuevo
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47a extra año nuevo
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47
La narrativa del conocimiento vol. ii no. 47
Mantener el amor a través de la naturalidad y la comunicación
1.
La Narrativa del
Conocimiento © Boletín de difusión del Pensamiento Publicación virtual quincenal Textos y Fotografías de Fernando de Alarcón Nueva época - Vol. IV No. 102 Febrero de 2015 Mantener el Amor Después de un cortejo breve o largo, sabio o ingenuo, el amor ha nacido. Pero para criarlo hacen falta cuidados constantes. El más poderoso de los atractivos: la novedad, es también el más pere- cedero. En los comienzos de un amor, cada uno tiene mil cosas que descubrir en el otro. Todo ser aporta de su juventud recuer- dos, retratos, canciones, anécdotas, que mezclados a las caricias hacen fácilmente deliciosos los primeros días amorosos. Pero, si se pierde capacidad comunicativa, estas reservas se agotan y muy pronto los cuentos que parecían tan nuevos se vuelven monótonos y gastados. Observen en un restaurante a las parejas sentadas a las mesas. La duración de sus silencios es, con de- masiada frecuencia, proporcional a la de su vida común. El genio del amor consiste en conservar en la unión una perpetua novedad. Quien ama verdaderamente, encuentra un placer per- fecto en pasearse cada día entre los pensamientos de aquel o de aquella a quien ama. Todos los días se agotan las maneras de agradar; y sin embargo, hay que agradar y se agrada. Esto no es ni siquiera un esfuerzo consciente. Cuando un ser tiene gracia, la tiene siempre y la gracia no cansa. Cada acto suyo, cada pala- bra, es una delicia. La vejez misma no transforma las naturale- zas. Un bello rostro envejece, y agrada volver a encontrar, bajo los cabellos blancos, la mirada y la sonrisa que habían sido ama- das bajo cabellos negros o rubios. ¿Hay un arte de mantener el amor? El gran secreto es la naturali- dad. Toda postura estirada es penosa de mantener y carece siempre de belleza. Así, pues, los amantes prudentes son aque- llos que se esfuerzan en mantener a su compañero dentro de su naturalidad. Hay hombres que pretenden modelar a su mujer, imponerle gustos, ideas. ¡Qué locura! Si la mujer es demasiado distinta de lo que nosotros amamos, no la amemos. Pero si la hemos elegido, dejémosla desenvolverse libremente. En la amis- tad como en el amor no se vuelve con placer más que a los seres con los cuales nos está permitido ser nosotros mismos, sin rigi- dez y sin mentira. Los amantes diestros cuidan también que sus encuentros ocu- rran en lugares naturalmente bellos. De aquí viene la costumbre, tan razonable, de los viajes de boda. Pero no es necesario ir tan lejos. Una mujer amorosa sabe, por instinto, componer ella mis- ma su decorado. Algunas, despliegan un arte adorable para lla- mar en su ayuda a todos los encantos de la naturaleza y del arte. Adivinan el momento en que el amante anhela la soledad de dos y el momento en el que, por el contrario, él tiene necesidad de un concierto, de un paseo. Es la mujer, mejor que el hombre, más dotada para la vida social, quien debe manejar los amores. El hombre, por su parte, si no quiere que tan buena voluntad y tan emocionante ternura se cansen, deberá comprender la impor- tancia del lugar que ocupa el amor en la vida de una mujer. Nada más estúpido que un hombre que, desde lo alto de una filosofía o una doctrina, desprecia los pensamientos de las mujeres. Estos son diferentes de los suyos, pero más concretos, más sencillos, más sagaces. Si el hombre se halla en conflicto con su amante, no será solamente por medio de un razonamiento por lo que podrá convencerla, sino por la ternura, por el silencio, por la pa- ciencia. No debe olvidar que la mujer, mucho más que él, está durante una gran parte de su vida a merced de su sistema ner- vioso. Si el hombre, en estos momentos difíciles, incomprende lo que no es otra cosa que la queja de un cuerpo que padece, corre el riesgo de destruir, a causa de un estado pasajero, lo que ha sido y podría ser todavía una bella unión. Es la imagen banal, pero bastante justa, la de comparar los movimientos del alma de la mujer a los océanos. El marido razonable, como el marino en medio de las tempestades, larga velas, está atento, espera, y las tormentas no le impiden amar el mar. Algunas reglas del arte de mantener el amor deben ser comunes a ambos sexos. La primera es la de demostrar, en la intimidad del amor, tan buenas maneras como en el primer encuentro. La cortesía no es incompatible con la cotidianidad. Todo se puede decir con gracia, y sería una extraña confusión la de tomar la bru- talidad por la única forma de la franqueza. La segunda regla es conservar en toda circunstancia un sentido del humor que sepa burlarse de sí mismo, darse cuenta de la puerilidad de la mayor parte de los disentimientos y no conceder una importancia trágica a esas colecciones de agravios que llenan las vitrinas de toda vida en pareja. Es vano agrandar cada tormento presente con el recuerdo de las querellas pasadas. La tercera regla es mantener los celos dentro de los límites razonables. Es decir, evitar a la vez complacencia y desconfianza que serían ambas ofensivas. La cuarta es permitir, por medio de la ruptura de rutinas, una nueva cristalización; las vacaciones amorosas, aderezadas por epísto- las y otras declaraciones de amor, desempeñan un papel útil. Ocurre que una pareja, habiendo perdido por el hábito y la pere- za el tono de la conversación tierna, lo encuentra por medio de la frase escrita. La última y la más secreta es la de seguir siendo novelesco… “¿Por qué, habiéndola ya conquistado, he de seguir cortejando a la persona que amo?... Porque, aún siendo mía, ella no me pertenecerá jamás…” Excelente tema de meditación para las personas que sean dignas de él. La inocencia natural, como el ser humano común, no existe más que una sola vez y no regresa. El humano, como los dioses, ama las primicias y no encontrará jamás, en la segunda inocencia, aunque ésta fuera mejor, el gusto ni el sabor de la primera. Mu- chas cosas no pueden aparecer más que una sola vez, porque lo único les es inherente y pertenece a su esencia. Nuestra vida es al mismo tiempo independiente y absoluta. No morimos sino en cierta medida, por así decirlo. Y nuestra vida por lo tanto debe consistir en ser parte de una comunidad más extensa. http://lanarrativadelconocimiento.blogspot.com Derechos reservados, 2015 © Banco de Historia VisualBanco de Historia Visual Sin nombre. Retoma el manto de los lirios en tus ojos y plásmalos en mi rostro al mirarme. Guárdame ese roce de tus manos, para el momento en que tú me conmemores. Y guarda en tu memoria y en tu mente mis palabras y mi imagen, consternados. Cuando toques el fondo de tus sueños y resurja el canto de tus sueños, no permitas que el recuerdo se te borre y piensa en que fuera de ti, aún es el rocío quien pretende ser amado. 1988 “Considera las contrariedades como un ejer- cicio.” Fernando de Alarcón / Banco de Historia Visual © Flores, México - 2003
Descargar ahora